Decidió una acción

RAMÓN BESA Javier Clemente mantuvo la pizarra exhibida ante Suiza aunque cambió algunos trazos: Caminero sentó a Hierro en el ombligo del campo mientras Otero ocupaba la demarcación de Camarasa en la banda izquierda. El grupo pareció bien plantado de salida. Fue, sin embargo un caballo de cartón en el primer tiempo. El balón no tuvo salida ni recorrido ni velocidad. El partido cambió de ritmo en la reanudación con los cambios. Clemente le ganó la partida a Sacchi, y el choque revivió como en la previa. España mandó en el campo, y una acción decidió: Salinas falló y Baggio acertó.

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RAMÓN BESA Javier Clemente mantuvo la pizarra exhibida ante Suiza aunque cambió algunos trazos: Caminero sentó a Hierro en el ombligo del campo mientras Otero ocupaba la demarcación de Camarasa en la banda izquierda. El grupo pareció bien plantado de salida. Fue, sin embargo un caballo de cartón en el primer tiempo. El balón no tuvo salida ni recorrido ni velocidad. El partido cambió de ritmo en la reanudación con los cambios. Clemente le ganó la partida a Sacchi, y el choque revivió como en la previa. España mandó en el campo, y una acción decidió: Salinas falló y Baggio acertó.

Portería. Zubizarreta no llegó al disparo de Dino Baggio en el primer gol y se le acusó de medir mal la salida en el segundo. Bien en los rechaces.

Defensa. Alkorta salió de la cueva para maniatar a Roberto Baggio y el equipo español se quedó con frecuencia desnudo. El madridista le hizo un buen control a la estrella italiana. Abelardo cuidó como un canguro de Massaro. Nadal fue sólo un barrendero. Los italianos consiguieron que la bola la manejara Alkorta, fomentando así su robo y ocasiones de gol.

Carrileros. Tassoti y Benarrivo cortaron el recorrido de las dobles parejas españolas mientras Donadoni y Conte forzaron a los laterales al repliegue.

Centrocampistas. Bakero y Caminero juntos no supieron dar rapidez a la pelota. Estuvo demasiado tiempo el cuero a los pies del azulgrana. No hubo un lanzador. Caminero resurgió con Hierro al lado, después de que la falta de apoyo y de desmarque de sus compañeros le obligaran a forzar su juego de conducción de balón. El atlético resolvió como es su costumbre de cara al gol. Los cambios les dieron oxígeno y debilitaron al rival. Italia seencogió.

Delantero. Luis Enrique intentó bajar para recibir y se movió con soltura, pero estuvo desasistido. La entrada de Salinas por Sergi devolvió al madridista al carril zurdo. Salinas sacó su juego corporal, pero falló de forma lamentable.