Una niña pedía ayuda de casa en casa por maltrato de su padrastro

Una niña de nueve años, e nombre Tamara, recorrió el jueves varios portales de Carabanchel pidiendo ayuda y cobijo porque su padrastro la maltrataba. La pequeña presentaba contusiones y hematomas en la cara, tronco y extremidades y, tras ser atendida en el hospital Doce de Octubre, ingresó en un centro de acogida de la Comunidad. El padrastro, Luis Alfonso O. L., de 25 años, que convivía con la madre de la chiquilla desde hace un ano, fue puesto a disposición judicial.Hacia el mediodía la niña tocó el portero automático en un bloque próximo a la calle de Portalegre donde vive con su madre. No ...

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Una niña de nueve años, e nombre Tamara, recorrió el jueves varios portales de Carabanchel pidiendo ayuda y cobijo porque su padrastro la maltrataba. La pequeña presentaba contusiones y hematomas en la cara, tronco y extremidades y, tras ser atendida en el hospital Doce de Octubre, ingresó en un centro de acogida de la Comunidad. El padrastro, Luis Alfonso O. L., de 25 años, que convivía con la madre de la chiquilla desde hace un ano, fue puesto a disposición judicial.Hacia el mediodía la niña tocó el portero automático en un bloque próximo a la calle de Portalegre donde vive con su madre. No era la primera casa donde llamaba. Una vecina salió al balcón y vio a una chiquilla "bien vestida y preciosa". Cuando llegó a su casa, muy atemorizada, se le echó a los brazos y le pidió quedarse en el piso. "Nos dijo que su padre la pegaba y nos enseñó un moratón en la cara, el labio partido y golpes en las nalgas", dijo.

"Al principio pensé que quizá algún adulto la utilizaba como gancho para entrar, ella notó nuestra extrañeza y se echó a llorar", añade. "Nunca la habíamos visto", concluye esta mujer, que avisé a la Policía Municipal. Después fue el Grupo de Menores del Cuerpo Nacional de Policía (Grume) quien se hizo cargo del asunto.

Según los agentes, el padrastro ha reconocido "haber dado algún cachete a la niña". Justificó los numerosos moratones diciendo que "como la pequeña tiene la. piel delicada se le notan más los hematomas" y que el golpe de la cara se debe "a que intentó pasar de una ventana a otra de la casa".

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