Los obispos consideran que la sociedad española actual es neopagana

La sociedad española es poscristiana y tiene una cultura neopagana. Sobre este diagnóstico, los obispos han elaborado su plan de acción pastoral para el próximo trienio, que fue aprobado ayer en la Conferencia Episcopal. Su vicepresidente, Fernando Sebastián, resaltó, al presentar el documento ante la prensa, que tiene en cuenta, como gran novedad, que el evangelio debe ser presentado como si España fuera un país de misión.

Sebastián, que compareció acompañado del obispo secretario, José Sánchez, señaló que la nueva pastoral de la Conferencia Episcopal considera como secundario el...

La sociedad española es poscristiana y tiene una cultura neopagana. Sobre este diagnóstico, los obispos han elaborado su plan de acción pastoral para el próximo trienio, que fue aprobado ayer en la Conferencia Episcopal. Su vicepresidente, Fernando Sebastián, resaltó, al presentar el documento ante la prensa, que tiene en cuenta, como gran novedad, que el evangelio debe ser presentado como si España fuera un país de misión.

Sebastián, que compareció acompañado del obispo secretario, José Sánchez, señaló que la nueva pastoral de la Conferencia Episcopal considera como secundario el modelo de Iglesia. Lo principal, dijo, es que el documento aprobado por los obispos -el texto recibió 54 votos favorables, cuatro negativos, igual número de abstenciones y uno nulo- "no da por supuesto la espontánea y fácil transmisión de la fe de generación en generación". "No es un plan pastoral", dijo, "de mantenimiento de la fe cristiana pacíficamente establecida".Sebastián, arzobispo de Pamplona-Tudela, indicó que el plan orienta los esfuerzos a "fortalecer y vitalizar la fe del cristiano", en primer lugar, y, segundo, "a desplegar unas actividades y lugares de encuentro" con quienes han abandonado la Iglesia. Por ello, añadió, el episcopado tiene que actuar como si España fuera "un país de misión, donde se presenta el Evangelio por primera vez" e, incluso, de forma apologética.

El arzobispo, que ha llevado el peso de la elaboración de este plan, que debía haber sido elaborado hace más de un año, durante la presidencia del cardenal Ángel Suquía, añadió que España es "un país que está en una fase de un conflicto entre cultura religiosa y no religiosa. Es un fuerte conflicto de fondo, tranquilo, pacífico pero fuerte", añadió. A juicio del arzobispo, en este conflicto, la Iglesia tiene que descender a "ese terreno profundo" para participar de la confrontación ideológica en todos los terrenos: personal, familiar, social y político.

El obispo secretario, José Sánchez, anunció asimismo que se reunirá, el próximo martes, con el ministro de Justicia, Juan Alberto Belloch, para evaluar el trabajo realizado por las comisiones creadas hace seis meses entre la Iglesia y el Estado. El obispo no quiso avanzar si en ese encuentro se cerrará algún nuevo acuerdo, como el relativo a la nueva ubicación curricular de la asignatura de Religión.