El antiguo obispo anglicano de Londres se ordena sacerdote católico

Graham Leonard, obispo anglicano de Londres entre 1981 y 1991, ha abrazado el catolicismo a los 72 años. Conocido por su oposición a la ordenación de mujeres sacerdote en la Iglesia de Inglaterra, se ha convertido en el miembro más relevante que la abandona. En una ceremonia celebrada el pasado sábado en la catedral de Westminster, y que se ha hecho pública ahora, Leonard ha sido ungido él mismo sacerdote católico. George Carey, arzobispo de Canterbury y primado de la Iglesia anglicana, le ha deseado suerte "en su continuo peregrinaje por el camino de la fe".

El pasado 6 de abril, ...

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Graham Leonard, obispo anglicano de Londres entre 1981 y 1991, ha abrazado el catolicismo a los 72 años. Conocido por su oposición a la ordenación de mujeres sacerdote en la Iglesia de Inglaterra, se ha convertido en el miembro más relevante que la abandona. En una ceremonia celebrada el pasado sábado en la catedral de Westminster, y que se ha hecho pública ahora, Leonard ha sido ungido él mismo sacerdote católico. George Carey, arzobispo de Canterbury y primado de la Iglesia anglicana, le ha deseado suerte "en su continuo peregrinaje por el camino de la fe".

El pasado 6 de abril, Leonard fue ya admitido como seglar católico por el cardenal Basil Hume. El antiguo obispo había iniciado, sin embargo, sus conversaciones con la jerarquía católica mucho antes. Sus primeros encuentros se remontan a 1992, cuando el Sínodo General, órgano de Gobierno de la Iglesia anglicana, aprobó la ordenación de mujeres. Su diócesis londinense se convirtió entonces en un centro de reunión de los que se oponían a ello. Una vez tomada su decisión, Leonard ha escrito al Papa Juan Pablo II y tiene previsto vivir retirado en su domicilio cercano a Oxford.

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