Nuevo accidente en las 'autopistas de la comunicación' de EE UU

Por segunda vez en menos de dos meses se ha roto una fusión entre una empresa operadora de cable y una compañía telefónica de Estados Unidos. En este caso se trata de la Cox Cable y de la Southwestern Bell, que han anunciado la cancelación de un acuerdo de asociación valorado en una suma equivalente a 700.000 millones de pesetas.

La ruptura anterior afectó a la telefónica Bell Atlantic y a la cableoperadora TCI, hecho que se produjo cuando ambas habían negociado un pacto por valor de 4,6 billones de pesetas.

Al igual que en el caso de la Bell Atlantic y de la TC1, los protago...

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Por segunda vez en menos de dos meses se ha roto una fusión entre una empresa operadora de cable y una compañía telefónica de Estados Unidos. En este caso se trata de la Cox Cable y de la Southwestern Bell, que han anunciado la cancelación de un acuerdo de asociación valorado en una suma equivalente a 700.000 millones de pesetas.

La ruptura anterior afectó a la telefónica Bell Atlantic y a la cableoperadora TCI, hecho que se produjo cuando ambas habían negociado un pacto por valor de 4,6 billones de pesetas.

Al igual que en el caso de la Bell Atlantic y de la TC1, los protagonistas de este nuevo accidente en la construcción de las llamadas autopistas de la comunicación atribuyen lo sucedido a las decisiones administrativas sobre las tarifas del cable. En febrero, la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), máxima autoridad estadounidense en la materia, ordenó a las compañías de cable reducir un 7% sus tarifas.

La consecuencia ha sido la ruptura de las dos fusiones, porque sus protagonistas entienden que no ofrece margen financiero suficiente. James Robbins, presidente de la Cox Cable, ha acusado a la FCC de "bombardear" los puentes de las autopistas de la comunicación.

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