Contactos para que la 'claúsula social' no rompa el GA TT

El director general del GATT, Peter Sutherland, mantuvo ayer numerosos encuentros con representantes de los países en vías de desarrollo y de Estados Unidos y Francia para tratar de superar los problemas derivados de la solicitud de inclusión de una cláusula sobre derechos sociales en los acuerdos comerciales que deben, firmarse la próxima semana en Marraquech (Marruecos). La inclusión de esta cláusula fue solicitada por Francia para tratar de evitar ventajas comerciales para determinados países como consecuencia de la falta de derechos sociales.

Fuentes cercanas al director general...

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El director general del GATT, Peter Sutherland, mantuvo ayer numerosos encuentros con representantes de los países en vías de desarrollo y de Estados Unidos y Francia para tratar de superar los problemas derivados de la solicitud de inclusión de una cláusula sobre derechos sociales en los acuerdos comerciales que deben, firmarse la próxima semana en Marraquech (Marruecos). La inclusión de esta cláusula fue solicitada por Francia para tratar de evitar ventajas comerciales para determinados países como consecuencia de la falta de derechos sociales.

Fuentes cercanas al director general del GATT señalaron que éste había presentado distintas iniciativas para salir del impasse: "Se han aportado ideas, aproximaciones, palabras. Todo el mundo busca una solución", informaron estas fuentes. "Hoy jueves es el último día posible para encontrar una solución de compromiso en Ginebra", se señala, ya que los responsables del GATT y las delegaciones abandonarán la ciudad suiza para dirigirse a Marraquech donde se inaugurará la conferencia el próximo martes.

En el supuesto de que no se alcanzara una solución, el problema debería someterse a los ministros de los 122 países participantes de la Ronda Uruguay lo que amenaza con empantanar la atmósfera de la reunión final llamada a rubricar solemnemente la más ambiciosa liberalización del comercio internacional.

El conflicto sobre los derechos sociales no supondrá la ruptura de los resultados alcanzados tras siete años de negociaciones en la llamada Ronda Uruguay. Pero, por el contrario, podría paralizar la puesta en marcha de la Organizacilón Mundial de Comercio (OMC) llamada a suceder al GATT.

Libertad sindical

Entre los documentos que se someterán a la firma de los ministros, dos se encuentran actualmente bloqueados. Estados Unidos exige, con el apoyo de Francia, que mencionen específicamente que los lazos entre comercio y derechos sociales deberán abordarse por la OMC. Los documentos en cuestión son la declaración final de Marraquech, que dibujará las grandes orientaciones de los futuros trabajos de las OMC y el que autoriza la creación de un comité preparatorio encargado de conducir la transición del GATT a la OMC.

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