Los tubos en uso de la tapa del reactor nuclear de Zorita también estan agrietados
El director de la instalación dice que no es necesario cerrarla
Los tubos que se usan -contienen barras de control del reactor- en la central nuclear de Zorita también están afectados por las grietas. El director reconoció ayer que se han detectado "algunas indicaciones [grietas no pasantes] en los tubos operativos del reactor" aunque declinó hacer un pronóstico mientras no termine la inspección. Llinares, sin embargo, restó importancia a este descubrimiento y afirmó que no cree que sea necesario cambiar la tapa de la vasija ni mucho menos cerrar la central. Pero será el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) el que decida.
La central nuclear de Zorita,...
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Los tubos que se usan -contienen barras de control del reactor- en la central nuclear de Zorita también están afectados por las grietas. El director reconoció ayer que se han detectado "algunas indicaciones [grietas no pasantes] en los tubos operativos del reactor" aunque declinó hacer un pronóstico mientras no termine la inspección. Llinares, sin embargo, restó importancia a este descubrimiento y afirmó que no cree que sea necesario cambiar la tapa de la vasija ni mucho menos cerrar la central. Pero será el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) el que decida.
La central nuclear de Zorita, la más antigua y pequeña de España, continuará su programa de inspección hasta el próximo lunes o martes y será entonces cuando se remitan los últimos informes y propuestas al Consejo de Seguridad Nuclear. No obstante, una de las dudas que había suscitado más expectación ha quedado disipada: los 18 tubos operativos del reactor nuclear también están afectados por el proceso de agrietamiento que ya se detectó en 14 de las 17 penetraciones o tubos de reserva.
Inactiva
Los técnicos que están trabajando en la central siguen sin manejar la solución de cambiar la tapa de la vasija, medida que además de costosa llevaría consigo el mantener inactiva la instalación casi un año. "Nuestra impresión es que no va a hacer falta y vamos a proponer otras soluciones del estilo a las utilizadas en otras centrales", prosigue Llinares, quien no cree que sea irremediable la circunstancia de que las indicaciones se extiendan por gran parte de los tubos del reactor. "La reparación consistiría en eliminar las indicaciones en la parte que está dañada mediante procedimientos mecánicos y de electroerosión". Para ello tienen que conocer la naturaleza exacta del defecto porque "no se puede hacer una reparación si ésta no demuestra que es segura", afirma tajantamente el director de Zorita.Este criterio contrasta con lo manifestado por el presidente del CSN, Donato Fuejo, en el Congreso, quien el pasado 2 de marzo dijo: "Con muchos menos daños en Francia y Suecia han decidido el cambio de la tapa de la vasija, en vez de la incertidumbre de la inspección constante".
El presidente del CSN reveló entonces que habían aparecido 171 grietas en 14 de los tubos o penetraciones de reserva que se llevaban revisados en aquella fecha.
También se encontraron posibles grietas circunferenciales alrededor del tubo, que son las más peligrosas, ya que podrían romper la tapa de la vasija de repente y provocar una fuga grave a la contención. Pendiente de los dictámenes finales, el director de Zorita informa que no se han hallado más grietas circunferenciales y "no es de esperar que se encuentren".
La empresa propietaria Unión Fenosa no quiere ni mencionar la palabra cierre solicitada ya por grupos ecologistas, Izquierda Unida y el sindicato Comisiones Obreras. Propone una solución técnica que tendrá que ser evaluada por el CSN a partir de la próxima semana y, en última instancia, por el Gobierno.