Eguiagaray afirma que la viabilidad de Santana no está garantizada

S. H. El ministro de Industria y Energía, Juan Manuel Eguiagaray, dijo ayer en el Congreso de los Diputados que "la viabilidad de Santana no está aún garantizada". En una interpelación parlamentaria promovida por IU, el diputado de este grupo, Felipe Alcaraz, pidió que el Estado se convierta en accionista de la empresa, culpó a la Administración central y autonómica de "oscurantismo" en la crisis de Santana y apeló a una solución urgente.

Eguiagaray respondió que el Gobierno busca diseñar un plan industrial de viabilidad y que compete a los accionistas, acreedores y trabajadores buscar ...

S. H. El ministro de Industria y Energía, Juan Manuel Eguiagaray, dijo ayer en el Congreso de los Diputados que "la viabilidad de Santana no está aún garantizada". En una interpelación parlamentaria promovida por IU, el diputado de este grupo, Felipe Alcaraz, pidió que el Estado se convierta en accionista de la empresa, culpó a la Administración central y autonómica de "oscurantismo" en la crisis de Santana y apeló a una solución urgente.

Eguiagaray respondió que el Gobierno busca diseñar un plan industrial de viabilidad y que compete a los accionistas, acreedores y trabajadores buscar la salida a la crisis. Eguiagaray recalcó una vez más que el Estado no va a ser accionista de la empresa y que el apoyo económico de las administraciones deben someterse a la normativa de la Unión Europea y encuadrarse en un proyecto rentable y viable. Acreedores

A juicio del ministro, Suzuki tiene que hacer un esfuerzo importante en el convenio de acreedores, ya que es el primer acreedor con el 69% de la deuda de Santana. Eguiagaray afirmó que Santana perdió el pasado año 4.809 millones de pesetas y que la ampliación de capital de 3.339 millones que hizo que Suzuki se convirtiera en el principal accionista (83%) no sirvió para compensar esas pérdidas. A esas pérdidas hay que unir los 2.261 millones que la empresa ha pagado por jubilaciones anticipadas para 154 trabajadores, lo que da una media de 14,6 millones por trabajador. El ministro destacó el bajo nivel de productividad de la empresa y un exceso de gastos de personal. Las ventas de Santana cayeron en 1993 el 13%.

El Parlamento Europeo, por otra parte, adoptará hoy una resolución sobre el cierre de la planta de Santana en Linares en la que se pide que la Comisión Europea intervenga ante el Gobierno japonés para que las multinacionales niponas no retiren sus inversiones en Europa.

Mientras, un miembro del comité de empresa de Santana, que asistió al debate celebrado ayeren el Parlamento andaluz, afirmó que los empleados aceptarían una reducción de plantilla si se garantiza la recolocación delos afectados en las industriasauxiliares.