Dos hoteles de lujo de Marbella presentan suspensión de pagos

La crisis del sector turístico está poniendo en dificultades a los hoteles de cinco estrellas de Marbella. La residencia Incosol y hotel Los Monteros, dos de los establecimientos turísticos más emblemáticos de Marbella y que estaban ligados a la familia Coca, han presentado sendos expedientes de suspensión de pagos ante los juzgados y otros dos planes de extinción de 140 contratos en la delegación provincial de Trabajo de Málaga. Con ellos, son ya cuatro los hoteles marbellíes de cinco estrellas que plantean recortes en sus plantillas en los últimos meses.Según los comités de empresa de Incoso...

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La crisis del sector turístico está poniendo en dificultades a los hoteles de cinco estrellas de Marbella. La residencia Incosol y hotel Los Monteros, dos de los establecimientos turísticos más emblemáticos de Marbella y que estaban ligados a la familia Coca, han presentado sendos expedientes de suspensión de pagos ante los juzgados y otros dos planes de extinción de 140 contratos en la delegación provincial de Trabajo de Málaga. Con ellos, son ya cuatro los hoteles marbellíes de cinco estrellas que plantean recortes en sus plantillas en los últimos meses.Según los comités de empresa de Incosol y Los Monteros, las deudas de ambas empresas podrían aproximarse a los 9.000 millones. Las centrales piden la intervención de la administración autonómica.

Los planes presentados por el administrador único contempla extinguir el contrato de 79 trabajadores en Incosol, que tiene actualmente 177 empleados fijos, y de 61 en Los Monteros, el único hotel que tiene reconocida la categoría de Gran Lujo en Marbella y que dispone en la actualidad de 185 trabajadores fijos y otros 70 fijos discontinuos:

Los sindicatos exigen asimismo negociar directamente con los propietarios de los hoteles. Ambos establecimientos pertenecían a la familia Coca y fueron vendidos a un banco estadounidense tras cuya quiebra se hizo responsable de sus pasivos la reserva federal norteamericana, que designó a Carlos Font como administrador único. Según los sindicatos, Font les ha asegurado que si aceptan los planes de reducción de plantilla, existe un comprador dispuesto a adquirir ambos establecimientos.

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