Los estudiantes se quejan de la dureza del 'hueso' de la Escuela de Obras

Delegación de Alumnos de la Universidad Politécnica ha escrito al rectorado para manifestar su queja por el excesivo número de suspensos de la cátedra de Matemáticas de la Escuela de Obras Públicas. Su titular, Luis J. Mateo, acumula un 61% de suspensos entre sus estudiantes. Los alumnos, en su escrito, califican la situación de "absurda" y "dramática".La cátedra citada es la que más alumnos tiene en ese centro. A los 400 nuevos de este año hay que añadir 800 de años anteriores, integrados por suspensos y no presentados. Si se tiene en cuenta que en la escuela hay un total de 1.700 estudiantes...

Delegación de Alumnos de la Universidad Politécnica ha escrito al rectorado para manifestar su queja por el excesivo número de suspensos de la cátedra de Matemáticas de la Escuela de Obras Públicas. Su titular, Luis J. Mateo, acumula un 61% de suspensos entre sus estudiantes. Los alumnos, en su escrito, califican la situación de "absurda" y "dramática".La cátedra citada es la que más alumnos tiene en ese centro. A los 400 nuevos de este año hay que añadir 800 de años anteriores, integrados por suspensos y no presentados. Si se tiene en cuenta que en la escuela hay un total de 1.700 estudiantes, no resulta extraño que sea difícil encontrarse por los pasillos con alumnos sin cuentas pendientes con las dos asignaturas de las dirigidas por Luis J. Mateo.

Una de las causas que ha empujado a la Delegación de Alumnos a redactar el escrito es que, con la nueva normativa de permanencia que entra en vigor este año en la Politécnica, un alumno repetidor necesita aprobar todas las asignaturas de primero menos una para no ser expulsado de esta Universidad, y muchos de los estudiantes de obras públicas tienen las dos materias de matemáticas pendientes.

"Como profesor, el catedrático Mateo no es malo; incluso le han dado un premio. El problema es que muchos de los otros profesores de matemáticas no explican bien y los exámenes son iguales para todos, tremendamente difíciles. El programa que abarcan las asignaturas es demasiado extenso", comentaba ayer un estudiante de esta escuela.

Otros alumnos no son tan benevolentes con el catedrático Mateo: "Yo sólo he aguantado un año y medio con él. Se cree Dios. Y lo dijo en clase una vez: yo soy Dios".

Por su parte, Mateo se limitó a decir que la cátedra de Matemáticas no hace declaraciones hasta que el rector no lo ordene". Tras la queja de la Delegación de Alumnos, el rector de la Politécnica, Rafael Portaencasa, ha solicitado informes a Obras Públicas sobre la cátedra de Matemátícas.