La Policía critica el "obstruccionismo" de la Embajada china

Un reciente informe de la policía critica que la "política obstruccionista" de la Embajada china en Madrid en la tarea de identificar a sus conciudadanos haya motivado que "la inmensa mayoría, de los ciudadanos chinos, que tenían decretada su expulsión, no pudieran ser enviados a su país de origen, ya que es imprescindible que vayan dotados de pasaporte o salvoconducto para que sean admitidos por las compañías aéreas".

El Gobierno de China sostiene una política de oposición a la inmigracion ilegal, y la Embajada y el Consulado en Barcelona siempre han colaborado con la policía", replica...

Un reciente informe de la policía critica que la "política obstruccionista" de la Embajada china en Madrid en la tarea de identificar a sus conciudadanos haya motivado que "la inmensa mayoría, de los ciudadanos chinos, que tenían decretada su expulsión, no pudieran ser enviados a su país de origen, ya que es imprescindible que vayan dotados de pasaporte o salvoconducto para que sean admitidos por las compañías aéreas".

El Gobierno de China sostiene una política de oposición a la inmigracion ilegal, y la Embajada y el Consulado en Barcelona siempre han colaborado con la policía", replica el primer secretario de dicha legación, Xiaoyuan Wang, quien esgrime la falta de personal para agilizar más tales gestiones.El análisis de los expertos del servicio de fronteras y extranjeros de la Comisaría General de Documentación no deja, en cambio, lugar a dudas: "Capítulo aparte merece la actitud que hasta hace aproximadamente dos meses [el informe data de agosto pasado] han mantenido las autoridades diplomáticas chinas en relación con las solicitudes que se formulan en las distintas brigadas. provinciales de documentación acerca de que provean de documentación a ciudadanos chinos indocumentados y sobre los cuales ha recaído una resolución de expulsión".

El texto prosigue: "La Embajada china en Madrid y los distintos consulados dependientes de ella sistemáticamente se negaban a facilitar la documentación requerida aduciendo causas insostenibles, como que las gestiones en China se dilatan mucho, que todas han de ser comprobadas y autorizadas por Pekín u otras excusas similares".

"Contrasta esta postura", añade el informe, "con la que mantuvieron con motivo del proceso de regularización, durante el cual instantáneamente se proporcionaban pasaportes o cualquier tipo de certificado".

"Pacto de silencio"

"Todo ello, unido al pacto de silencio que caracteriza a la comunidad china en España, hace que en la práctica a dicho colectivo no se le pueda aplicar la ley de extranjería, máxime si tenemos en cuenta el reciente descubrimiento por las redes de inmigración del resquicio legal que les ofrece la legislación española y que ha hecho que las solicitudes de asilo y/ o refugio se hayan incrementado de forma sorprendente" desde marzo de 1993, apostilla el informe policial.El pasado año hasta el verano más de 700 ciudadanos chinos presentaron solicitudes de asilo y refugio, frente a las 26 de 1992. La Policía considera prioritario atajar la inmigración ilegal china, ante la evidencia de que está siendo movida por mafias con terminales en distintos países europeos y con implicación en distintas actividades delictivas.

El precio por el traslado desde China oscila entre uno y tres millones de pesetas. La ruta común es la siguiente: de China a Moscú en avión, y desde allí por carretera hasta España. La organización dispone de pisos, fundamentalmente, en Moscú, Praga y Budapest. Otra ruta frecuente es China-Bangkok-Madrid o Barcelona.

El poder de estas mafias es implacable. "Existe un sistema de extorsión perfectamente estructurado y que cuenta con contundentes medios para asegurar el resultado. En ocasiones, confidencialmente, algún ciudadano chino ha expuesto esta situación, pero todos ellos se niegan a formular denuncias concretas". Recientemente, fue detenido en la frontera franco-italiana un ciudadano chino, Siu Yiu Ye, que intentaba introducir en Francia con destino a España tres pistolas. Hay constancia también de ajustes de cuentas por asuntos de drogas que estas mismas redes introducen ya en España.

La Policía sospecha que la proliferación de restaurantes chinos encierra en no pocos casos una operación de blanqueo de las ganancias de dicho tráfico. Y hay constancia de la involucración en actividades de juego clandestino y de trata de blancas de estas mafias. La Policía y funcionarios de Trabajo se plantean un peinado de todos los negocios regentados por chinos para aflorar la mano de obra ilegal.