LA CRISIS DE BANESTO

Un banco muy repartido

Más de la mitad de los accionistas tiene menos de 100 títulos

Centenares de miles de familias españolas tienen en sus carteras acciones de este banco que forma parte de la más rancia tradición del sistema financiero español. Se trata de pequeños paquetes, muchos de ellos configurados en los años del desarrollismo cuando la estrella del banco brillaba con más fuerza. Ahora, 13 bancos, cinco sociedades de gestión de activos, seis financieras, cinco empresas de servicios no financieros, siete de medios y tecnología, 12 en el grupo industrial, dos aseguradoras y cuatro financieras internacionales forman el conglomerado Banesto. Esas son sólo las más importan...

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Centenares de miles de familias españolas tienen en sus carteras acciones de este banco que forma parte de la más rancia tradición del sistema financiero español. Se trata de pequeños paquetes, muchos de ellos configurados en los años del desarrollismo cuando la estrella del banco brillaba con más fuerza. Ahora, 13 bancos, cinco sociedades de gestión de activos, seis financieras, cinco empresas de servicios no financieros, siete de medios y tecnología, 12 en el grupo industrial, dos aseguradoras y cuatro financieras internacionales forman el conglomerado Banesto. Esas son sólo las más importantes de las 80 sociedades en las que Banesto posee algún tipo de participación, a las que hay que añadir otras 17 asociadas.Banesto, la cabecera del grupo, es uno de los cuatro grandes bancos españoles. En 1992 contaba con 15.927 empleados en 2.262 oficinas y un total de 235.160 accionistas, ninguno de los cuales tiene más del 5% del capital.

De acuerdo con la última memoria del banco -que no recoge la macroampliación de capital- más de la mitad de los accionistas tiene menos de 100 acciones, mientras que aquellos con más de 5.000 acciones representan aproximadamente el 50% del capital. Los accionistas individuales tienen un 66,65% del capital, mientras que el resto corresponde a instituciones. Existe otro 13,26% en manos de extranjeros. Al cierre del ejercicio del año pasado, no existían participaciones superiores al 5% del capital.

Banesto resaltó en su memoria que si bien la tendencia del mercado es hacia la disminución del número de accionistas de las entidades debido al éxito de los fondos de inversión, Banesto aumentó durante 1992 la cifra total de accionistas en 65.972 1o que añade aún más fortaleza y estabilidad a su base accionarial".

Según refleja la memoria del pasado año, Banesto registró un descenso del 1,3% en sus activos totales (4,911 billones) por el bajo crecimiento de los créditos sobre clientes y por el descenso en los activos con otras entidades de crédito. La inversión crediticia (2,412 billones) experimentó un crecimiento modesto (2,7% en términos brutos). La cartera de valores, por su parte, (1,271 billones), creció un 7,09%.

Los recursos propios del banco eran de 249.569 millones de pesetas, con un aumento del 4,15% antes de la distribución del resultado. Los recursos de clientes, por su parte, se situaron en los 3,149 billones de pesetas, un 3,3% más que el año anterior.

Morosidad

El problema de la morosidad atacó directamente a Banesto el pasado año, con un aumento en los créditos dudosos del 142,89% sobre el año anterior, y con una cifra de 186.427 millones de pesetas. Las provisiones para insolvencias aumentaron en un 23,66%, mientras que los riesgos totales lo hicieron en un 3,89%.

Banesto registró el pasado año un descenso del 55,66% en la cuenta de resultados, después de que su beneficio neto pasara de los 45.568 millones registrados en 1991 a los 20.218 millones de 1992. El margen de intermediación bajó en un 2,54% y se situó el pasado año en 383.192 millones de pesetas. En cuanto a los gastos de explotación, supusieron 125.880 millones de pesetas, con una caída del 0,37% respecto del año anterior. La entidad atribuye este descenso a la puesta en marcha de su plan tecnológico.

Por su parte, el grupo consolidado presentó el pasado año un activo de 7,112 billones de pesetas, lo que supuso un incremento del 3,81% respecto del año anterior. Las rúbricas más significativas del balance, créditos sobre clientes y depósitos, representan un 50,1% y un 63,4% de los activos y pasivos totales, respectivamente. Los créditos sobre clientes alcanzaron en 1992 3,562 billones de pesetas, un 13,09% más que en 1991.

Los deudores dudosos o muy dudosos del grupo ascendieron el pasado año a 257.399 millones de pesetas, un 6,9% de la inversión crediticia total. El fondo de provisión para insolvencias ascendió a 147.592 millones, un 31% más que el año anterior.

Banesto informó en su memoria del año 1992 que el margen de intermediación creció un 14,5% el pasado. año. Los gastos de explotación del grupo crecieron el pasado año un 7,6%, con un crecimiento en los gastos generales del 4,5%. El resultado bruto de explotación aumentó un 33,2%.

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