Un automovilista golpea a un peató r n que le merepo

Miguel Domínguez Fraile buscaba ayer piso con su companera Lourdes y el representante de una inmobiliaria. Al cruzar la calle de Carlos Martín Álvarez (Vallecas), el conductor de un Opel Corsa estuvo a punto de atropellarles. Él le increpó y el otro intentó atropellarles de nuevo. Tras ser sujetado, el conductor optó por perseguirlos a pie con una barra de hierro..Miguel tiene cinco puntosjunto al ojo izquierdo y ha presentado denuncia ante la policía contra el chófer de un Opel Corsa blanco con matrícula M-6483413.Los hechos ocurrieron a las doce de la mañana. Según relata Domínguez, u...

Miguel Domínguez Fraile buscaba ayer piso con su companera Lourdes y el representante de una inmobiliaria. Al cruzar la calle de Carlos Martín Álvarez (Vallecas), el conductor de un Opel Corsa estuvo a punto de atropellarles. Él le increpó y el otro intentó atropellarles de nuevo. Tras ser sujetado, el conductor optó por perseguirlos a pie con una barra de hierro..Miguel tiene cinco puntosjunto al ojo izquierdo y ha presentado denuncia ante la policía contra el chófer de un Opel Corsa blanco con matrícula M-6483413.Los hechos ocurrieron a las doce de la mañana. Según relata Domínguez, un administrativo de 36 años, el grupo em- pezó a cruzar la calle cuando el semáforo estaba para los peatones. Cuando estaban en medio del paso de cebra, un automóvil pasó a toda velocidad y él increpó al conductor. "Le llamé animal o desgraciado. Entonces, él giró con el coche, intentó atropellarnos. Luego se bajó. Era un hombre mayor, de pelo cano. Echamos a correr y la gente leagarró". Sin embargo, la pesadilla no había acabado. Miguel, con su novia y el administrativo de la inmobiliaria siguieron en dirección al piso, p8r la calle de Javier de Miguel.

-Derepente me golpearon por la espalda. Era el conductor del Corsa. Tenía el antirrobo en la rnano". El agresor le golpeó junto al ojo y en la mano izquierda, con la que intentó protegerse. "Sólo una señora se acercó a ayudarnos", explica Lourdes.

Miguel Domínguez fue atendido en la casa de socorro de Vallecas, donde le diagonosticaron "traumatismo y herida inciso contusa en el ojo izquierdo", amén de "traumatismo craneal". También le vendaron la mano.

Posteriormente, se dirigió a la comisaría del mismo barrio, donde presentó la correspondiente denuncia. "Es tremendo que haya estos comportamientos. Parece una jungla", se queja el agredido. Miguel Domínguez aún tiene la gabardina manchada de sangre, el dolor en el cuerpo y el sobresalto en el alma. Sólo espera que se detenga muy pronto a su agresor.