El protocolo en la cena desató el conflicto entre el País Vasco y la IAAF

La distribución de plazas en la mesa presidencial de la cena que la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) ofreció a las autoridades en vísperas de la Copa del Mundo de maratón, desencadenó el conflicto que ha vetado al País Vasco para organizar futuras competiciones internacionales dependientes del organismo que preside el italiano Primo Nebiolo. Éste desplazó de la mesa al diputado de Deportes guipuzcoano, señor Santano, y a su esposa, para sentar al alcalde de Atenas, ciudad organizadora de la próxima Copa del Mundo, y a su intérprete.El detalle no gustó a las autoridades vascas, que ...

La distribución de plazas en la mesa presidencial de la cena que la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) ofreció a las autoridades en vísperas de la Copa del Mundo de maratón, desencadenó el conflicto que ha vetado al País Vasco para organizar futuras competiciones internacionales dependientes del organismo que preside el italiano Primo Nebiolo. Éste desplazó de la mesa al diputado de Deportes guipuzcoano, señor Santano, y a su esposa, para sentar al alcalde de Atenas, ciudad organizadora de la próxima Copa del Mundo, y a su intérprete.El detalle no gustó a las autoridades vascas, que consideraron posteriormente un agravio que Nebiolo no agradeciera en su discurso la colaboración del Gobierno Vasco, lo que motivó que el consejero de Turismo, Joseba Arregui, abandonara la sala y cuando le hicieron recapacitar su gesto, pronunciara su discurso en euskera e inglés, en un ambiente de gran tensión.

Fernando Echevarria, responsable del protocolo en la competición, califica de "provocadora" la actitud que mantuvo Nebiolo desde su llegada: "No asistió a la cena que ofrecimos el viernes, el sábado llegó tarde a la comida que daba la ciudad de Atenas y se marchó antes de terminar, desplante que repitió en la cena del conflicto. Al día siguiente, ordenó el palco a su gusto y no permitió que los premios se repartieran según el protocolo que habíamos previsto, en el que el lendakari daba la medalla, el alcalde entregaba el ramo de flores y él ponía la txapela. Al final se hizo acompañar de Cortés Elvira, secretario de Estado para el Deporte, y Juantorena, viceministro de deportes cubano".