El mundo como texto

Jurij Mijailovich Lotman, in memóriam (1922-1993).Un prestigioso matemático ruso dictó una conferencia dedicada a los aspectos matemáticos del corte de los vestidos a la que acudió un público diferente al habitual, sastres, señoras a la moda, etcétera. La primera fase del conferenciante, "admitamos, para simplificar, que el cuerpo humano tenga la forma de una esfera", provocó una fuga general, permaneciendo en la sala sólo los iniciados. Esta anécdota de la biografía de P. L. Cebysev le sirve a Lotinan para explicar que el texto selecciona al público a su imagen y semejanz...

Jurij Mijailovich Lotman, in memóriam (1922-1993).Un prestigioso matemático ruso dictó una conferencia dedicada a los aspectos matemáticos del corte de los vestidos a la que acudió un público diferente al habitual, sastres, señoras a la moda, etcétera. La primera fase del conferenciante, "admitamos, para simplificar, que el cuerpo humano tenga la forma de una esfera", provocó una fuga general, permaneciendo en la sala sólo los iniciados. Esta anécdota de la biografía de P. L. Cebysev le sirve a Lotinan para explicar que el texto selecciona al público a su imagen y semejanza.

El texto, cuyo etimo lo presenta como tejido, mecanismo semiótico autónomo, fue la preocupación de este gran semiólogo de Leningrado, transterrado a Tartu (Estonia), que con gran ambición quiso desarrollar una tipología de la cultura, a través precisamente de sus textos, de su plurilingüismo, de su actitud respecto al Signo, de su traducibilidad.

Su (gran) último libro, La cultura y la explosión, describe los géneros de desarrollo, gradual y explosivo, de las culturas que permiten o la continuidad o la innovación. Con Lotman desaparece no sólo el mejor de los semiólogos rusos, sino un gran pensador de raza. De la misma que dieron nombres como Propp, Bojatirev, Bajun o Jakobson Jorge Lozano