Un recorte de plantilla del 40% en TAP bloquea el aeropuerto de Lisboa

La dirección de TAP, la línea aérea portuguesa, anunció ayer un plan de ajuste que recoge una recorte de plantilla de 4.000 trabajadores -sobre un total de 10.000- hasta 1997 y cuantifica las inversiones necesarias para no desaparecer en unos 80.000 millones de pesetas.El anuncio de este plan ha provocado la inmediata reacción de los empleados de la línea aérea. Ayer mismo, unas 600 personas invadieron una de las pistas de estacionamiento de aviones del aeropuerto de Lisboa, e impidieron el despegue de tres vuelos.

La recuperación de TAP, compañía en la que el Estado portugués es accion...

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La dirección de TAP, la línea aérea portuguesa, anunció ayer un plan de ajuste que recoge una recorte de plantilla de 4.000 trabajadores -sobre un total de 10.000- hasta 1997 y cuantifica las inversiones necesarias para no desaparecer en unos 80.000 millones de pesetas.El anuncio de este plan ha provocado la inmediata reacción de los empleados de la línea aérea. Ayer mismo, unas 600 personas invadieron una de las pistas de estacionamiento de aviones del aeropuerto de Lisboa, e impidieron el despegue de tres vuelos.

La recuperación de TAP, compañía en la que el Estado portugués es accionista mayoritario, pasa también por la supresión de 16 rutas deficitarias del Atlántico Norte y del enlace Lisboa-Casablanca (Marruecos).

En esa estrategia figura asimismo su conversión en aerolínea regional, que volaría a las grandes capitales de Europa y a los archipiélagos atlánticos portugueses de Azores y Madeira.

La administración de TAP admite la hipótesis de de aliarse con aerolíneas europeas o estadounidenses, y tiene previsto participar con un 25% en el capital de Air Macao, compañía en formación en ese territorio portugués que en 1999 pasará a la soberanía de China Popular.

Al margen de las protestas de ayer, los sindicatos han reconocido la necesidad de emprender una reforma en profundidad, aunque han calificado de "inaceptable" el plan propuesto.

Air France

Una asamblea general del personal de tierra de Air France del aeropuerto de Roissy-Charles de Gaulle se pronunció ayer por una amplia mayoría a favor de la suspensión de la huelga que tenían prevista. La protesta se reanudará el próximo martes, 2 de noviembre.Mientras tanto, la actividad en el conjunto de la compañía francesa se fue recuperando de forma progresiva a lo largo del día de ayer, con la casi única excepción de un grupo de huelguistas que ocuparon la sede de la compañía.

Por su parte, el nuevo presidente de la compañía aérea, Christian Blanc, señaló que "no tomaremos ninguna decisión relativa al plan social mientras no alcancemos una concertación social".

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