Pinto Fontán: "Sólo soy un asesor"

El promotor José Luis Fontán (que es apellida Gómez Pinto desde 1987) declaró ayer al juez que investiga una estafa en una urbanización de Aravaca que sólo es un asesor técnico de la empresa que ha motivado la querella: Aravaca-Somosaguas. Pinto asegura que no tiene ninguna responsabilidad en la compañía y que los que le señalan como su auténtico dueño -varios ex colaboradores- han cometido "una ligereza". La querella ha engordado en los últimos días y ya son 15 compradores de pisos los que se han sumado a la denuncia.

José Luis Pinto Fontán acudió ayer a declarar al Juzgado de Instrucc...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El promotor José Luis Fontán (que es apellida Gómez Pinto desde 1987) declaró ayer al juez que investiga una estafa en una urbanización de Aravaca que sólo es un asesor técnico de la empresa que ha motivado la querella: Aravaca-Somosaguas. Pinto asegura que no tiene ninguna responsabilidad en la compañía y que los que le señalan como su auténtico dueño -varios ex colaboradores- han cometido "una ligereza". La querella ha engordado en los últimos días y ya son 15 compradores de pisos los que se han sumado a la denuncia.

José Luis Pinto Fontán acudió ayer a declarar al Juzgado de Instrucción número 27 de Madrid acompañado de su abogado, José María Stampa Braun, que sustituye en el caso a su anterior letrado, el diputado José María Mohedano. Pinto Fontán apareció en los pasillos de los juzgados visiblemente nervioso, pero extremadamente puntual. A las diez de la mañana, el promotor y su abogado salieron del ascensor y ante el callejón sin salida de fotógrafos y cámaras de televisión escaparon a un juzgado equivocado En el despacho en el que prestó declaración como imputado -el correspondiente al juzgado 27 de Instrucción- permaneció unas dos horas.

Viejos conocidos

Pinto contó al magistrado que se considera un arquitecto frustrado: sólo pudo estudiar dos años de ingeniería técnica industrial. Pero su amplia experiencia en el mundo de la construcción -levantó en los años setenta varias urbanizaciones polémicas en los municipios de Móstoles y Fuenlabrada, donde dejó 21 bloques inacabados que infringían la normativa urbanística- le facultan para ejercer como asesor de sus viejos conocidos.

Algunos de ellos -José Manuel O'Connor, Antonio Díaz Jara y Juan Antonio Mínguez Gómez- han asegurado al juez que José Luis Pinto Fontán es el auténtico dueño de la empresa Aravaca-Somosaguas y quien tomaba todas las decisiones financieras y administrativas en la misma. El responde que sólo acudía a la obra y ni siquiera tiene una mesa en la sede de la compañía.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Pinto Fontán niega todo y califica "cuando menos, de ligereza" dichas declaraciones. El promotor reconoce que asistió a reuniones con directivos de La Caixa, entidad a la que también se dirige la querella.

Sin embargo, insiste en el hecho de que nunca trató asuntos relacionados con la financiación de la urbanización Las Terrazas de Aravaca, todavía inacabada. "Los que tomaban las decisiones", afirma Pinto, "eran Carlos García Yanes [secretario del Consejo de Administración], Mínguez Gómez [consejero y primo segundo de Pinto], O'Connor [también consejero] y Díaz Jara [gerente]". Todos ellos aparecen también como imputados (posibles responsables de los hechos) en la querella. A otras preguntas del magistrado, Pinto responde con el olvido.

Llamadas conminatorias

Pinto Fontán no se acuerda de, cuándo comenzó a asesorar a la empresa, ni si ya estaba constituida cuando él comenzó a trabajar para ella, ni si ya habían comprado los terrenos, aunque afirma que intervino en su adquisición "sólo como asesor". Unicamente aconseja a esta empresa, por eso no recuerda con exactitud cuándo se incorporó a ella. Pinto Fontán sí tiene en la memoria haber conocido hace 25 años a los que ahora le implican en esta investigación judicial. Con respecto a José Manuel O'Connor, quien ha declarado que sólo trabajó con Pinto Fontán entre los años 1989 y 1991, afirma que no es cierto que no volviesen a coincidir desde que le conociese en los años sesenta, cuando todavía era pasante de un importante abogado que ya ha fallecido.

"Muchas veces he tenido conversaciones con O'Connor sobre diversos proyectos porque está muy vinculado a la construcción", asegura Pinto.

El abogado de la acusación -a la que ahora se han sumado otros 14 querellantes, compradores de pisos en Las Terrazas de Aravaca- manifiesta haber recibido una llamada conminándole a un entendimiento entre las partes para que resolviese el conflicto. Pinto asegura que no ha encargado a nadie realizar esa llamada.

Archivado En