Tribuna:

La importancia de la presión

Siempre es arriesgado anticipar lo que puede ocurrir cuando se enfrentan dos grandes equipos como el Real Madrid y Barcelona. Y más cuando se van a jugar la Copa tan sólo cuatro días antes de que ambos vuelvan a pelear por algo más importante: la Liga.El partido de esta noche tiene un gran peso psicológico. Si uno de los dos equipos deja herido al otro, será difícil que el derrotado recupere su estado anímico en tan poco espacio de tiempo. Sólo el trabajo psicológico previo y la profesionalidad de los jugadores puede evitar que la herida dejada por la presión creada sea mortal.

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Siempre es arriesgado anticipar lo que puede ocurrir cuando se enfrentan dos grandes equipos como el Real Madrid y Barcelona. Y más cuando se van a jugar la Copa tan sólo cuatro días antes de que ambos vuelvan a pelear por algo más importante: la Liga.El partido de esta noche tiene un gran peso psicológico. Si uno de los dos equipos deja herido al otro, será difícil que el derrotado recupere su estado anímico en tan poco espacio de tiempo. Sólo el trabajo psicológico previo y la profesionalidad de los jugadores puede evitar que la herida dejada por la presión creada sea mortal.

En el partido de Madrid quedó claro como afrontaron la Copa ambos equipos.

El Barcelona, a conseguir un buen resultado para seguir confiando en sí mismo; el Madrid, para demostrar que su buena racha es producto de un buen trabajo de equipo.

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La idea generalizada de que la disciplina y el orden son las claves del juego del Madrid y que el Barcelona lo basa todo en el ataque puro y duro, es demasiado simplista. Ambos son equipos organizados, con conceptos distintos, pero con personalidades y esquemas muy definidos. El Madrid, con un sistema zonal 4-4-1 - 1, y el Barça con un 3-5-2. La lucha en el centro del campo será encarnizada. Quien sea capaz de marcar el ritmo en esa zona, dominará el partido.

Pero por mucho que se quiera planificar, siempre hay que dejar un margen para la improvisación. De hecho, los momentos más inspirados del Madrid han llegado cuando sus jugadores, por estar en inferioridad numérica, han tenido que desenvolverse en un radio de acción más amplio y se han sentido más libres para expresarse. El Barça, por el contrario, tiene muchos jugadores que se divierten atacando, pero a veces les falta la concentración necesaria y se olvidan de lo que pasa atrás. Esas lagunas defensivas les han costado muy caras.

A estas alturas de la temporada se impondrá el equipo que supere la presión. El aspecto psicológico va a ser, pues, la clave.

Vicente Miera fue el seleccionador del equipo español que ganó el oro en los JJ OO de 1992.

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