'Hay mejor clima en Aquisgrán que en Madrid"

Aquisgrán, la ciudad de Carlomagno, era ayer una fiesta dedicada a Felipe González, y éste fue sensible a ello hasta el punto de declarar en la atiborrada plaza Katschhof que "hay mejor clima en Aquisgrán que en Madrid". Hacía ayer en Alemania más calor que en España, y los habitantes, de esta pequeña ciudad alemana ovacionaron al Premio Carlomagno 1993.En Aquisgrán era difícil ignorar que González ha obtenido ese premio. Además de las banderas españolas que engalanaban las calles, el retrato de González figura en numerosos escaparates. Y el banco local ha acuñado dos monedas conmemorativas de...

Aquisgrán, la ciudad de Carlomagno, era ayer una fiesta dedicada a Felipe González, y éste fue sensible a ello hasta el punto de declarar en la atiborrada plaza Katschhof que "hay mejor clima en Aquisgrán que en Madrid". Hacía ayer en Alemania más calor que en España, y los habitantes, de esta pequeña ciudad alemana ovacionaron al Premio Carlomagno 1993.En Aquisgrán era difícil ignorar que González ha obtenido ese premio. Además de las banderas españolas que engalanaban las calles, el retrato de González figura en numerosos escaparates. Y el banco local ha acuñado dos monedas conmemorativas del evento con retratos del presidente español. Las de plata se venden a 7.585 pesetas; las de bronce, a 3.050.

Jürgen Linden, el alcalde, presentó a González ante sus conciudadanos "como una de las esperanzas de Europa", e invitó a su huésped a que improvisase un discurso. El jefe del Gobierno empezó una alocución seria, interrumpida por constantes aplausos, sobre "la necesidad de apostar un poco más por Europa y un poco menos por el nacionalismo". Luego se dejó llevar por el ambiente festivo.

"Compartir el mismo micro "con la intérprete que le traducía al alemán, bromeó el presidente, "nos plantea algún problema, sobre todo en presencia de mi esposa", Carmen Romero, que, junto con los tres hermanos de González -Maruja, Lola y Juan María- y parte de sus invitados se habían colocado detrás de él en la tribuna. "Nos verán hacer", prosiguió refiriéndose a él y a la intérprete, "algún movimiento extraño para turnarnos ante el micrófono que no sé si se interpretará mal". Las risas sustituyeron a los aplausos.

Tras los elogios que le prodigó en Bonn Helmut Kohl, la acogida de Aquisgrán acabó de levantar el ánimo, de González. Por la tarde recibió en su hotel al presidente de la Comisión Europea, el francés Jacques Delors, y éste aseguró a la salida que su interlocutor "está en plena forma". "El PSOE no correrá la suerte que el Partido Socialista francés", que perdió las elecciones generales en marzo, concluyó Delors, miembro de la formación derrotada.