Las deudas por suspensiones de pagos crecieron un 56% en febrero

La economía española dio ayer una nueva muestra de la mala coyuntura que está atravesando. En febrero, aumentaron un 56% las deudas declaradas por suspensiones de pagos y crecieron los efectos impagados y las quiebras, aunque estas últimas siguen aumentando a ritmo moderado.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), 81 empresas suspendieron pagos en febrero, frente a 48 un año antes. La deuda global declarada en estas suspensiones fue de 45.409 millones de pesetas, con un aumento del 5.6% en relación con el mismo mes del año anterior, según datos del INE.

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La economía española dio ayer una nueva muestra de la mala coyuntura que está atravesando. En febrero, aumentaron un 56% las deudas declaradas por suspensiones de pagos y crecieron los efectos impagados y las quiebras, aunque estas últimas siguen aumentando a ritmo moderado.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), 81 empresas suspendieron pagos en febrero, frente a 48 un año antes. La deuda global declarada en estas suspensiones fue de 45.409 millones de pesetas, con un aumento del 5.6% en relación con el mismo mes del año anterior, según datos del INE.

Lo significativo de este nuevo aumento sigue siendo que arranca de crecimientos muy importantes durante el último año y medio, sobre todo a partir de mediados de 1992, cuando el brusco cambio de coyuntura económica disparó las suspensiones de pagos hasta acabar el año muy por encima del nivel crítico de 1981.

Las quiebras, por el contrario, siguen creciendo a ritmo muy moderado. Según el INE, en febrero quebraron 34 sociedades, el mismo número de las que fueron liquidadas por esta vía el año pasado. El pasivo o deudas que declararon estas empresas ascendió a 3.891 millones de pesetas.

La caída de las ventas, las dificultades de financiación y los problemas de liquidez a que ello conduce continúan siendo los principales motivos que alegan las empresas cuando llevan sus libros al juzgado, según el INE. Por sectores, las empresas textiles, metalúrgicas, manufactureras y de hostelería figuran a la cabeza por número de suspensiones de pagos.

Otro dato revelador de la mala coyuntura económica es el aumento de las sociedades disueltas -736, frente a 294 un año antes- y el freno en la creación de nuevas empresas. Según el INE, en enero se crearon 1. 177 sociedades menos que un año antes (5.621, frente a 6.768).

Menos hipotecas

El deterioro de la solvencia económica sigue afectando también a los consumidores. En enero, los efectos impagados (letras y talones, fundamentalmente) volvieron a crecer. Se devolvieron 1,58 millones de efectos por un importe total de 262.065 millones de pesetas, un 3,7% más que el año anterior.Las hipotecas firmadas, otro indicador del nivel de actividad económica, registraron un fuerte retroceso. Esta caída se produce pese a que que los precios de la vivienda han tocado fondo o están muy próximos a hacerlo tras las fuertes subidas de los últimos años, según expertos consultados.

En enero, la banca concedió 30.788 créditos hipotecarios para la compra de casas urbanas con una financiación de 226.600 millones de pesetas. Esta financiación supone un descenso del 19% respecto a la concedida por la banca y las financieras en febrero de 1992.

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