La Iglesia no aceptará "jamás" la anulación civil del matrimonio canónico

"La Iglesia católica no podrá aceptar jamás que los Estados sean competentes para declarar nulos los matrimonios canónicos", ha afirmado Zenon Grocholewski, secretario del Tribunal de la Signatura Apostólica, que es el que tiene competencia sobre los recursos de casación dentro del organigrama del Vaticano.

Grocholewski, que hizo estas. declaraciones a la revista Il Sabato, comentando una reciente sentencia del Tribunal de Casación italiano, que ha sustraído a la Iglesia su competencia tradicionalmente exclusiva sobre los matrimonios celebrados al amparo, de su ley, añade que...

"La Iglesia católica no podrá aceptar jamás que los Estados sean competentes para declarar nulos los matrimonios canónicos", ha afirmado Zenon Grocholewski, secretario del Tribunal de la Signatura Apostólica, que es el que tiene competencia sobre los recursos de casación dentro del organigrama del Vaticano.

Grocholewski, que hizo estas. declaraciones a la revista Il Sabato, comentando una reciente sentencia del Tribunal de Casación italiano, que ha sustraído a la Iglesia su competencia tradicionalmente exclusiva sobre los matrimonios celebrados al amparo, de su ley, añade que "ni siquiera en los casos en los que la declaración de nulidad fuera motivada por las mismas causas previstas en el derecho canónico, como, por ejemplo, la impotencia o la incapacidad", resulta aceptable la intervención resolutoria de los tribunales civiles.

El jurista vaticano niega, además, que el hecho de que el último acuerdo de revisión del Concordato entre la Santa Sede y el Gobierno italiano ignore esta materia pueda ser interpretado como una aceptación tácita de la doble jurisdicción por parte del Vaticano.

"La verdad es que, si acaso, la Iglesia no logró hacer valer su exclusividad cuando se redactaron los nuevos acuerdos", afirma el alto prelado, que advierte a los fieles: "La nulidad declarada por el Estado valdrá únicamente por lo que se refiere a sus efectos civiles. Pero la Iglesia seguirá considerando que un matrimonio contraído por la Iglesia es válido, mientras un tribunal canónico no se pronuncie en sentido contrario".