Arzalluz dice que "la España eterna" se ha alzado para lincharle
"La España eterna se ha alzado a linchar al vasco que dicen ha osado proclamar la singularidad de su pueblo con referencias genéticas", asegura el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, en un artículo publicado ayer en el diario nacionalista Deía, sobre la polémica causada por sus alusiones raciales en un discurso en Tolosa.El líder del nacionalismo conservador agrega en su texto que lo de la pureza de la sangre y "lo de los apellidos es, en origen, una exigencia española de limpieza de sangre, y no una arrogancia vasca".
El presidente peneuvista hace una encendida de...
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"La España eterna se ha alzado a linchar al vasco que dicen ha osado proclamar la singularidad de su pueblo con referencias genéticas", asegura el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, en un artículo publicado ayer en el diario nacionalista Deía, sobre la polémica causada por sus alusiones raciales en un discurso en Tolosa.El líder del nacionalismo conservador agrega en su texto que lo de la pureza de la sangre y "lo de los apellidos es, en origen, una exigencia española de limpieza de sangre, y no una arrogancia vasca".
El presidente peneuvista hace una encendida defensa del fundador de su partido, Sabino Arana, frente a quienes le acusan de racista y xenófobo, y dice: "Nunca el nacionalismo aranista ha llegado ni en la teoría ni en la práctica a los excesos xenófobos y racistas a los que ha llegado el nacionalismo español".
Tras una encendida defensa del fundador del PNV, Sabino Arana, frente a quienes le acusan de racista y Xenófobo, el dirigente peneuvista responsabiliza a los "cachorros del nacionalismo español" de que "mientras se ensalza al puertorriqueño, matan al dominicano o acuchillan al árabe o al africano. Y nada de eso está sucediendo en Euzkadi sino en el corazón de la Hispanidad".
Arzalluz no evita la polémica sobre la raza y la pureza de sangre y arremete contra la "España eterna" que "durante siglos" ha obligado a "acreditar mediante expediente judicial el no tener mezcla ni raza de moros, judíos, herejes ni penitenciados". Y añade: "El vasco, que no necesitaba nada de eso para la vida pública o privada en su tierra, tenía que probar judicialmente su limpieza de sangre si salía a Castilla o a América, o accedía a algún servicio o dignidad real y eclesiástico".
A juicio del dirigente vasco, "si se juzgara todo ésto como se juzga a Sabino Arana, está clara la conclusión: "la España eterna era de un racismo subido".