Un juez cita a tres policías por irregularidades al manipular droga

La titular del Juzgado número 21 de Barcelona, María del Carmen Suárez, ha citado a declarar en. calidad de inculpados a un comisario de policía y dos agentes acusados de cometer irregularidades con las cantidades de droga intervenidas. Los policías citados son el comisario Francisco Rodríguez Álvarez, el, inspector jefe Baltasar Fernández Lobato y el inspector Javier López Cuartero.La investigación se inició hace un año, después de que la policía detuviera en Barcelona a un traficante de droga que declaró que la mercancía, procedente de Madrid, estaba destinada a Juan Carlos Vega Rebeco,...

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La titular del Juzgado número 21 de Barcelona, María del Carmen Suárez, ha citado a declarar en. calidad de inculpados a un comisario de policía y dos agentes acusados de cometer irregularidades con las cantidades de droga intervenidas. Los policías citados son el comisario Francisco Rodríguez Álvarez, el, inspector jefe Baltasar Fernández Lobato y el inspector Javier López Cuartero.La investigación se inició hace un año, después de que la policía detuviera en Barcelona a un traficante de droga que declaró que la mercancía, procedente de Madrid, estaba destinada a Juan Carlos Vega Rebeco, un confidente policial en asuntos de atracos y que colaboró en la investigación del asalto al Banco Hispano Americano en Barcelona en 1985. Vega fue citado como testigo, pero huyó al comprobar que su condición de confidente no impedía la acción de la justicia. El fiscal antidroga, José María Mena, ordenó su ingreso en prisión.

El confidente, que estuvo viviendo en Italia y en Francia, envió cartas a la policía, primero; a la fiscalía, después, y por último, a la juez, relatando que los agentes le habían pagado informaciones con partidas de cocaína y heroína, según la versión ofrecida por la cadena SER. Por contra, Mena declaró a este diario que tenía la convicción de que Vega nunca había recibido droga después de la investigación que ordenó. La jefatura dé policía afirmó ayer que la brigada de asuntos internos del cuerpo archivó el caso al concluir que no habían existido transacciones con droga.

El confidente, que cumplió una condena en un centro psiquiátrico penitenciario, explicaba en sus cartas tres casos de supuesta corrupción, entre ellos el pago de 500 gramos de cocaína que dos de los policías citados le habrían entregado en 1991 y otro de 300 gramos de heroína en 1985. La fiscalía, que ordenó el interrogatorio de un elevado número de agentes, no da crédito a esta versión, aunque sospecha que pudieron desviarse pequeñas cantidades de la droga intervenida en la operación que desencadenó la investigación.

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