Matrimonio de conveniencia entre ecologistas

., Los ecologistas franceses se presentan juntos y en buena armonía a las elecciones legislativas. El pasado jueves, Los Verdes y Generación Ecología confirmaron su matrimonio de conveniencia y se repartieron como buenos hermanos las candidaturas a las 551 circunscripciones en litigio. Según los resultados de los últimos sondeos, recogerán así entre el 14% y el 17% de los sufragios.En las elecciones regionales de 1992, los ecologistas compitieron por separado. Generación Ecología, el partído dirigido por el ex ministro del Medio Ambiente Brice Lalonde, obtuvo el 7,1% de los votos, y Los Ve...

., Los ecologistas franceses se presentan juntos y en buena armonía a las elecciones legislativas. El pasado jueves, Los Verdes y Generación Ecología confirmaron su matrimonio de conveniencia y se repartieron como buenos hermanos las candidaturas a las 551 circunscripciones en litigio. Según los resultados de los últimos sondeos, recogerán así entre el 14% y el 17% de los sufragios.En las elecciones regionales de 1992, los ecologistas compitieron por separado. Generación Ecología, el partído dirigido por el ex ministro del Medio Ambiente Brice Lalonde, obtuvo el 7,1% de los votos, y Los Verdes, encabezados por Antoine Waechter, el 6,9%. Marie-Christine Blandin, de Los Verdes, se convirtió en el primer presidente ecologista de una región francesa: el Norte-Paso de Calais.

Esta vez, los dos grupos ecologistas, tras rechazar uno y otro las insistentes ofertas de alianza del crespuscular Partido Socialista, han superado sus querellas de familia. El pasado noviembre, las dos formaciones firmaron el acuerdo electoral materializado hace unos días. Tienen así la posibilidad de superar el duro obstáculo del sistema mayoritario a doble vuelta y conseguir colocar algunos diputados en la Asamblea Nacional.

Dirigidos por Waechter, Lalonde y la nueva estrella verde, Dominique Voynet, los ecologistas van a beneficiarse de su imagen de juventud y honestidad, y del descrédito de la clase política en general y de los socialistas en particular.

Numerosos votantes tradicionales de la izquierda se preparan para depositar en la primera vuelta papeletas coloreadas de verde. Aún más grave para el partido en el poder: las encuestas revelan que, en la segunda vuelta, muchos electores socialistas están dispuestos a apoyar a los candidatos ecologistas que tengan una posibilidad de salir elegidos, mientras que no se produce el fenómeno contrario.