Cartas al director

El calvario de siempre

Por circunstancias, tuve que trasladarme a Canarias, y el regreso se convirtió en un calvario. El avión, que debía salir a las 11.00, lo hizo a las 11.40; el vuelo, que era directo, con Iberia se transformó en Las Palmas-Lanzarote vía Binter y Lanzarote-Madrid con Aviaco. Ya en la capital de España, el equipaje tardó 45 minutos en aparecer, y ya harto me marché a mi domicilio, donde me percaté de que uno de los bolsones estaba roto y un amigo de lo ajeno se había apropiado de buena parte de los regalos adquiridos. En Aviaco sólo he conseguido un "en fin, pasa a menudo, hay que pillarlos con la...

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Por circunstancias, tuve que trasladarme a Canarias, y el regreso se convirtió en un calvario. El avión, que debía salir a las 11.00, lo hizo a las 11.40; el vuelo, que era directo, con Iberia se transformó en Las Palmas-Lanzarote vía Binter y Lanzarote-Madrid con Aviaco. Ya en la capital de España, el equipaje tardó 45 minutos en aparecer, y ya harto me marché a mi domicilio, donde me percaté de que uno de los bolsones estaba roto y un amigo de lo ajeno se había apropiado de buena parte de los regalos adquiridos. En Aviaco sólo he conseguido un "en fin, pasa a menudo, hay que pillarlos con las manos en la masa, cosas", palabras textuales. ¿Cómo es que el aeropuerto y las compañías se lavan las manos ante la tomadura de pelo de un viaje accidentado y un destrozo con sustracción? Si pago religiosamente mis impuestos y supuestamente vuelo con el Estado, ¿por qué no ponen letreros que indiquen "precaución, zona de rateros" o Iadrones a bordo". Lo más triste de todo es que la corrupción se ha institucionalizado en todos los niveles y los que pagamos somos siempre los mismos.-

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