El ambulatorio de especialidades de Villaverde lleva tres años cerrado por obras de reforma
El Insalud cerró el ambulatorio de especialidades de Villaverde Cruce en 1989. El edificio, construido en la década de los sesenta, necesitaba una reforma. Casi cuatro años después, los trabajos aún no han concluido. Las asociaciones vecinales de la zona denuncian que las obras siempre han tenido un ritmo lento por problemas presupuestarios. "Estuvieron paradas más de un año, y después, nunca han venido más de ocho obreros", aseguran los vecinos.
Desde que el centro echó la persiana, los 140.000 asegurados del distrito tienen las consultas de médicos especialistas en el Doce de Octubre....
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El Insalud cerró el ambulatorio de especialidades de Villaverde Cruce en 1989. El edificio, construido en la década de los sesenta, necesitaba una reforma. Casi cuatro años después, los trabajos aún no han concluido. Las asociaciones vecinales de la zona denuncian que las obras siempre han tenido un ritmo lento por problemas presupuestarios. "Estuvieron paradas más de un año, y después, nunca han venido más de ocho obreros", aseguran los vecinos.
Desde que el centro echó la persiana, los 140.000 asegurados del distrito tienen las consultas de médicos especialistas en el Doce de Octubre. Este traslado ha producido problemas de masificación en el citado centro sanitario.El ambulatorio está situado en la calle de Alcarria, junto a la antigua carretera de Andalucía. A pocos metros fue inaugurado, hace una semana, lo que varias entidades vecinales de la zona bautizaron como "monumento a la desidia": varias vigas que cayeron de un camión hace tiempo y que ningún servicio público se ha dignado retirar de la vía pública.
Las obras de este centro sanitario comenzaron con mal pie. Poco después de iniciarse los trabajos se descubrió la deficiente cimentación del edificio, que descansaba sobre un lecho de cenizas.
Este problema alteró el proyecto de construcción y disparó el presupuesto previsto para las obras. Durante meses, los trabajos estuvieron paralizados. En agosto de 1990, el inmueble se había convertido en un refugio de toxicómanos.
Plazo vencido
Los vecinos del Cruce empezaron a preocuparse ante el rumbo que tomaba el asunto y decidieron elevar su queja al ministro de Sanidad y Consumo. El 11 de octubre de 1990 las autoridades contestaban a la petición dando un plazo de finalización de los trabajos: 12 meses a partir de esa fecha. Se valló el recinto y se puso vigilancia para evitar que nadie entrase en él. Pero, cumplido el plazo de un año dado por el Ministerio de Sanidad, las obras de reforma del edificio seguían semiparalizadas.En abril de 1992, el malestar vecinal alcanzó un punto culminante cuando corrió el rumor de que las obras se iban a suspender. Después de un rosario de entrevistas con responsables del Insalud, incluido el entonces recién nombrado director territorial, la conclusión era siempre la misma: los problemas presupuestarios demoraban los trabajos.
La presidenta de la asociación de vecinos del Cruce, Teresa Tomás, presente en todas esas reuniones, asegura que "el presupuesto inicial se ha multiplicado tanto que la inyección económica necesaria para acabar la obra sólo la puede aprobar el Consejo de Estado". Ningún responsable del Insalud ha atendido a la solicitud de información efectuada por este periódico.
Mientras, los 140.000 asegurados del distrito tienen que seguir perdiendo tiempo y paciencia en las grandes aglomeraciones que padecen las consultas médicas del hospital Doce de Octubre, causadas en gran medida por su forzado traslado tras el cierre del ambulatorio.