Bérégevoy: "No habrá acuerdo con EE UU hasta después de las elecciones"

El primer ministro francés, Pierre Bérégevoy, aseguró ayer que "no habrá ningún acuerdo sobre las negociaciones del GATT [Acuerdo General de Aranceles y Comercio] hasta después de las elecciones presidenciales estadounidenses". "La discusión deberá reanudarse con la nueva Administración, ya sea con Bush o con Clinton", dijo el jefe del Gobierno francés durante un coloquio celebrado en la Universidad parisiense de la Sorbona.Bérégevoy trató, de esta forma, de rechazar que el posible interés de Bush por acelerar un acuerdo como arma electoral vaya a despejar las incógnitas a corto plazo. En ese ...

El primer ministro francés, Pierre Bérégevoy, aseguró ayer que "no habrá ningún acuerdo sobre las negociaciones del GATT [Acuerdo General de Aranceles y Comercio] hasta después de las elecciones presidenciales estadounidenses". "La discusión deberá reanudarse con la nueva Administración, ya sea con Bush o con Clinton", dijo el jefe del Gobierno francés durante un coloquio celebrado en la Universidad parisiense de la Sorbona.Bérégevoy trató, de esta forma, de rechazar que el posible interés de Bush por acelerar un acuerdo como arma electoral vaya a despejar las incógnitas a corto plazo. En ese sentido, destacó que existen muchas discrepancias en el terreno agrícola "pese a los progresos logrados". El primer ministro calificó las discusiones del GATT de Iaboriosas por razones objetivas". Ante ello, reseñó: "Será necesario llegar a un acuerdo, pero a un acuerdo equilibrado".

Las manifestaciones de Bérégevoy hicieron hincapié en las que ya había hecho, días atrás, Roland Dumas, ministro de Exteriores francés, en las que mostraba ese escepticismo. Precisamente, el primer ministro británico John Major, presidente en ejercicio de la CE, precisó que trataría de hacer todo lo posible para que las conversaciones se reanuden cuanto antes y poder alcanzar un acuerdo. La secretaria de Estado de Comercio Exterior de Holanda, Yvonne van Rooy, dijo que tenía esperanzas de que "Francia acepte reducir las exportaciones y subvenciones agrícolas europeas para concluir las negociaciones".

Las relaciones entre Estados Unidos y la CE han seguido en tensión. Al abandono de los representantes del país norteamericano de Bruselas, han seguido unas manifestaciones de representantes estadounidenses responsabilizando a la CE de la ruptura. Fuentes comunitarias, al respecto, reseñaban que EE UU mantiene una actitud orgullosa "como se demuestra en la amenaza de gravar con 1.000 millones de dólares las importaciones europeas" y responsabilizaban del retraso a los lobbies (grupos de presión) agrarios de Estados Unidos.