La sequía y los vertidos arrastran a la muerte a cientos de peces en el río Manzanares

El Manzanares hace tiempo que dejó de ser un río a su paso por Madrid para convertirse en un gran colector. La sequía ha agravado esta situación. La falta de agua limpia se ha cobrado este fin de semana sus primeras víctimas en un número indeterminado de "peces advenedizos" o no habituados a este entorno, que la Concejalía de Medio Ambiente sitúa en medio centenar. Los vecinos de la zona, especialmente los de la colonia del Manzanares, entienden que han sido muchos más.

El río Manzanares es un reflejo bastante aproximado de lo que sucede en Madrid con el agua. La presa de El Pardo nutre...

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El Manzanares hace tiempo que dejó de ser un río a su paso por Madrid para convertirse en un gran colector. La sequía ha agravado esta situación. La falta de agua limpia se ha cobrado este fin de semana sus primeras víctimas en un número indeterminado de "peces advenedizos" o no habituados a este entorno, que la Concejalía de Medio Ambiente sitúa en medio centenar. Los vecinos de la zona, especialmente los de la colonia del Manzanares, entienden que han sido muchos más.

El río Manzanares es un reflejo bastante aproximado de lo que sucede en Madrid con el agua. La presa de El Pardo nutre en estos momentos el caudal del Manzanares con 200 litros nuevos por segundo, mientras la ciudad devuelve al río unos 12.000 litros por segundo ya utilizados. La desproporción se nota, fundamentalmente, en la falta de oxígeno del agua.Este agua, procedente de las depuradoras, es residual y sus niveles de oxígeno son mucho más bajos que la natural. El porcentaje actual se calcula, por zonas, en un promedio de tres o cuatro, miligramos por litro.

Esta cantidad de oxígeno se considera incluso insuficiente para las 10.000 carpas residen tes desde hace años en el río, por lo que se está inyectando oxígeno artificialmente, y se ha demostrado mortífera para los peces no acostumbrados, o "advenedizos". Estos ejemplares, procedentes de El Pardo, y fundamentalmente lucios o peces gatos, son los que han muerto este fin de semana., Aunque también han muerto algunas carpas.

El departamento de saneamiento de aguas de la Concejalía de Medio Ambiente reconoce que, además de la sequía, los pe ces están siendo atacados estos últimos días por los vertidos habituales del invierno, como el gasóleo de las calderas.

El viernes pasado se observó un vertido incontrolado que arrojó sobre el río durante una hora un líquido de coloración roja y textura de alquitrán, que pudo provocar las últimas muertes. El sábado aparecieron los peces flotando.

Un portavoz del servicio de saneamiento de aguas explicó que el equilibrio del río es tan inestable y crítico que en las actuales circunstancias de sequía cualquier vertido puede ser fatal para especies no habituadas. En el Manzanares, además, fallecen diariamente unas 10 carpas, pero de viejas.

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