Los fuegos artificiales hieren a una mujer y alarman a un barrio

El espectáculo de fuegos artificiales organizado por el Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes convirtió el barrio del Praderón en un "campo de batalla", sembrado de restos de pirotecnia, explican sus vecinos. Los muros de las casas se estremecieron al compás de un ruido ensordecedor, y los pastos de unas instalaciones militares cercanas se incendiaron. Lamentablemente, este traca festiva se saldó con un herido y con cuantiosos daños materiales en la barriada.

La pirotecnia preparada por el Ayuntamiento del municipio, que celebra estos días sus fiestas patronales, también abrasó los...

El espectáculo de fuegos artificiales organizado por el Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes convirtió el barrio del Praderón en un "campo de batalla", sembrado de restos de pirotecnia, explican sus vecinos. Los muros de las casas se estremecieron al compás de un ruido ensordecedor, y los pastos de unas instalaciones militares cercanas se incendiaron. Lamentablemente, este traca festiva se saldó con un herido y con cuantiosos daños materiales en la barriada.

La pirotecnia preparada por el Ayuntamiento del municipio, que celebra estos días sus fiestas patronales, también abrasó los patios de algunas casas. Hubo daños en tejados y enseres, entre otros destrozos que han denunciado los habitantes del Praderón, cuyas calles rebosaban ayer de restos pirotécnicos.Un cartucho de plástico lleno de pólvora, de 380 gramos de peso, cayó sin explotar en el patio de Natividad, mientras ella, su marido y sus hijos pequeños, presos del pánico, se resguardaban en el interior de la vivienda. En otras casas los restos de petardos caían "como bolas de fuego", asegura Emilia. Éstos provocaron los incendios, quemaduras en animales y desperfectos en los enseres de las viviendas.

Ricardo, rodeado de un grupo de vecinos, vertía ayer en el pavimento de la calle Valle del Guadalix el contenido de varias bolsas, resultado de la limpieza hecha en el barrio: petardos sin explotar o carcasas de plástico, algunas con pólvora y de considerable tamaño. Esta es la muestra de "la lluvia" que tuvieron que soportar los vecinos, que junto a una lista de daños y un buen número de firmas sostendrá la denuncia que presentarán en la comisaría del municipio.

Los daños más cuantiosos se registraron en una nave que almacena centenares de acuarios. Sus empleados aseguran haber perdido entre 2.000 y 3.000 peces tropicales, valorados en varios millones de pesetas, que murieron por el tremendo estruendo de los fuegos artificiales.

Una mujer, que ayer viajó a Barcelona, tuvo que ser atendida de quemaduras en un centro médico al caerle en la cara "una chispa bastante grande", asegura uno de sus familiares.

"Una cosa terrorífica"

La indignación de los vecinos por la falta de atención de las fuerzas de seguridad y de las autoridades municipales seguía patente en la mañana de ayer. Pilar asegura que su casa está llena de pólvora, toda sucia, negra, como si hubiese habido una guerra". Añade que aún resguardándose bajo el porche no se libraban de la continua lluvia de objetos. Su padre agrega que el espectáculo "parecía una auténtica guerra con metralla incluída. Era una cosa terrorífica".Los bomberos de la Comunidad de Madrid, con sede en Alcobendas, apagaron el fuego que consumió 300 metros cuadrados de rastrojo en el interior del recinto del Ministerio de la Marina, en el que se alzan varias antenas de comunicaciones. Personal del ministerio procedía ayer a cortar y mojar el pasto.

La sequedad del césped del parque donde se ubicaron los fuegos propició que se quemaran pequeñas zonas del mismo.

Mientras el jefe del gabinete de prensa del Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes desconocía a mediodía de ayer el incidente, el alcalde socialista, José Luis Blanco, no hizo ningún comentario en los actos en honor del Cristo de los Remedios.