1.200 reclutas causan graves destrozos en el tren que les trasladaba al cuartel para empezar 'mili'

Unos 1.200 reclutas procedentes de Barcelona, que se dirigían a Zaragoza para incorporarse al servicio militar, causaron el lunes graves destrozos en el tren fletado por el Ministerio de Defensa para su desplazamiento, según informaron ayer varios diarios aragoneses. Un portavoz de Renfe anunció que esta mañana se presentará una denuncia en el juzgado de guardia de la localidad oscense de Sariñena, a unos 50 kilómetros de Huesca, donde se produjeron los incidentes más graves. Los daños han sido valorados inicialmente por Renfe en unos cinco millones de pesetas. Los destrozos, c...

Unos 1.200 reclutas procedentes de Barcelona, que se dirigían a Zaragoza para incorporarse al servicio militar, causaron el lunes graves destrozos en el tren fletado por el Ministerio de Defensa para su desplazamiento, según informaron ayer varios diarios aragoneses. Un portavoz de Renfe anunció que esta mañana se presentará una denuncia en el juzgado de guardia de la localidad oscense de Sariñena, a unos 50 kilómetros de Huesca, donde se produjeron los incidentes más graves. Los daños han sido valorados inicialmente por Renfe en unos cinco millones de pesetas. Los destrozos, cuya coste económico definitivo evaluaban ayer técnicos de la empresa antes de presentar la denuncia, afectan fundamentalmente al mobiliario del tren: papeleras, escalerillas, extintores, ventanillas, cortinas, ropa de cama e incluso literas y puertas. También resultaron afectados, por su manipulación indebida, los sistemas de alarma y de bloqueo de frenos.

El tren tipo Expreso, formado por 12 vagones y ocupado íntegramente por reclutas, fue fletado de acuerdo con el convenio suscrito entre la compañía ferroviaria y el Ministerio de Defensa para el transporte de material militar y el. desplazamiento de los jóvenes que se incorporan a filas.

Los incidentes empezaron ya a la salida de Barcelona, pasadas las siete de la mañana, cuando algunos jóvenes rompieron las ventanillas y empezaron a arrojar por ellas diversos objetos. Los momentos de mayor tensión se vivieron, no obstante, en las proximidades de Sariñena, después de que algunos ocupantes accionaran indebidamente el freno de emergencia, lo que bloqueó el tren por espacio de dos horas.

El convoy tuvo que ser retirado de la vía principal para una reparación de urgencia, que le permitió reemprender viaje sobre a primera hora de la tarde.

Custodia de la Guardia Civil

Durante la parada, Renfe dio aviso a la Comandancia de la Guardia Civil, que envió a 21 agentes, quienes viajaron en el tren hasta su destino, para evitar nuevos incidentes. Según algunas informaciones, que Renfe no pudo confirmar ayer, a bordo del convoy iban dos agentes de seguridad privados, que se vieron impotentes para impedir el vandalismo.La Policía Nacional y la Municipal desplegaron un dispositivo de seguridad a la llegada del tren a la estación zaragozana de El Portillo, con cinco horas de retraso, pero no fue precisa su intervención, ya que la mayoría de los reclutas fueron llevados en autobuses a sus respectivas unidades.

Fuentes del Gobierno Militar de Zaragoza indicaron que no se ha producido detención alguna ni sancionado a los autores de los sucesos, puesto que no existe aún ninguna denuncia, pero agregaron que el Ejército prestará al juez toda la colaboración que este reclame.

Un portavoz del Ministerio de Defensa declaró ayer tarde en Madrid que quienes protagonizaron los destrozos "no son militares, sino personal civil, ya que aún no se habían incorporado al servicio militar", por lo que no estaban sujetos a la disciplina castrense.

"El Ministerio de Defensa se limita a entregar a los jóvenes un pasaporte personal e individualizado que pueden canjear en Renfe por un billete de tren para la localidad donde esté su unidad de destino", agregó el mismo portavoz. Fuentes de Renfe señalaron, por su parte, que los servicios jurídicos de la compañía no han decidido aún en qué términos se planteará la denuncia ni contra quién irá dirigida, aunque sugirieron que de Defensa es responsable civil subsidiario de los hechos.

El pasado 25 de mayo, un grupo de quintos ocasionó ya destrozos similares en el tren que cubría el trayecto Barcelona-Zaragoza y asaltaron una tienda de comestibles en la localidad oscense de Grañén durante una de las paradas. Un recluta tuvo que ser ingresado en el Hospital Militar de Zaragoza en estado de coma etílico.