Mentira piadosa

La desconfianza de los inversores españoles es tan grande que han necesitado de dos subidas consecutivas en los mercados internacionales para dejarse llevar por la inercia. La situación ha roto completamente con el ambiente de la jornada anterior, en la que el papel se imponía con facilidad a pesar de los avances externos. En esta sesión, la concentración del negocio se ha dirigido a muy pocos valores, lo que deja mucho que desear sobre la solidez de esta subida, pues cinco sociedades, entre ellas tres semipúblicas, han acaparado el 54% del volumen total que, a su vez, fue inferior en 1.000 mi...

La desconfianza de los inversores españoles es tan grande que han necesitado de dos subidas consecutivas en los mercados internacionales para dejarse llevar por la inercia. La situación ha roto completamente con el ambiente de la jornada anterior, en la que el papel se imponía con facilidad a pesar de los avances externos. En esta sesión, la concentración del negocio se ha dirigido a muy pocos valores, lo que deja mucho que desear sobre la solidez de esta subida, pues cinco sociedades, entre ellas tres semipúblicas, han acaparado el 54% del volumen total que, a su vez, fue inferior en 1.000 millones de pesetas al de la sesión anterior. Con estos datos en la mano, no queda más remedio que situar esta reacción en el terreno técnico, y calificarla de exagerada en función de los recursos aportados. En cualquier caso, el mercado ha saltado más de un 2% desde el nivel mínimo del ejercicio, una situación cuando menos curiosa para hacer frente al resultado de la subasta de letras del Tesoro que ha de celebrarse esta mañana.

Al final, los 40 puntos que ganaba Wall Street y los avances de las bolsas europeas facilitaron la labor alcista y el índice se anota una subida del 2,17%, 4,58 puntos, que en el caso del Ibex 35 es del 2,53% gracias a la mayor ponderación de los valores más negociados.