Cartas al director

Justicia y opinión pública

Puedo llegar a entender que un defecto de forma invalide unas pruebas acusatorias en un juicio, en teoría es una garantía más de defensión para cualquier ciudadano. Ahora bien, lo que es válido para juristas no es obligado que lo sea para la opinión pública, y tampoco es posible pedir que ésta haga oídos sordos a lo escuchado en las cintas del caso Naseiro. Se podrá llegar a decir que el, sistema judicial ha salido fortalecido, pero la clase política ha quedado una vez más totalmente: desprestigiada, por lo que es incomprensible cómo se pueden felicitar desde el Partido Popular.Si Nasei...

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Puedo llegar a entender que un defecto de forma invalide unas pruebas acusatorias en un juicio, en teoría es una garantía más de defensión para cualquier ciudadano. Ahora bien, lo que es válido para juristas no es obligado que lo sea para la opinión pública, y tampoco es posible pedir que ésta haga oídos sordos a lo escuchado en las cintas del caso Naseiro. Se podrá llegar a decir que el, sistema judicial ha salido fortalecido, pero la clase política ha quedado una vez más totalmente: desprestigiada, por lo que es incomprensible cómo se pueden felicitar desde el Partido Popular.Si Naseiro y Palop, y por extensión el PP y todas las instituciones políticas, quieren quedar incólumes y sin tacha ante la ciudadanía a la que periódicamente recurren vendiéndoles una imagen de honradez y bien hacer, tienen dos alternativas: demostrar que las cintas están manipuladas y que no son ellos los que hablan, o inculparse, y como se suele decir cuando de robagallinas se habla, pagar su deuda con la sociedad.

No es de extrañar que personajes pintorescos, más bien siniestros, roben votos y escaños a los que dicen ser profesionales de la política.-

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