Cartas al director

Las bibliotecas públicas

Le envío esta carta con la esperanza de que todo el mundo se entere de un problema que afecta a unos pocos, pero que incumbe a muchos: el estado de las bibliotecas públicas. En la mayor parte de las bibliotecas de adultos es casi imposible coger un libro con menos de ocho años de antigüedad.

La mayoría tiene las tapas rotas y dobladas, las hojas sueltas y el título semiborrado.

Los bibliotecarios arreglan como pueden los preciados objetos, poniendo parches y, forros por doquier, pero eso es todo lo que pueden hacer: arreglar.

Por eso, ruego a la Administración que dé un po...

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Le envío esta carta con la esperanza de que todo el mundo se entere de un problema que afecta a unos pocos, pero que incumbe a muchos: el estado de las bibliotecas públicas. En la mayor parte de las bibliotecas de adultos es casi imposible coger un libro con menos de ocho años de antigüedad.

La mayoría tiene las tapas rotas y dobladas, las hojas sueltas y el título semiborrado.

Los bibliotecarios arreglan como pueden los preciados objetos, poniendo parches y, forros por doquier, pero eso es todo lo que pueden hacer: arreglar.

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Por eso, ruego a la Administración que dé un poco más de presupuesto para las bibliotecas, tan vitales para una sociedad civilizada. Nuestros libros no están precisamente estropeados por su gran uso.-

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