Tribuna:

Una mala noticia bien vale un esfuerzo

Las ventas de los llamados bienes duraderos -aquellos que perduran entre tres y diez años- han caído en Estados Unidos un 2,4% durante el mes de mayo. Este dato confirma la debilidad de la demanda y, por tanto, las enormes dificultades que está encontrando la economía norteamericana para conseguir la recuperación. El presidente Bush solicitó inmediatamente a las autoridades monetarias un recorte de los tipos de interés para intentar una vez más la anhelada reactivación económica. Con estos datos en la manó, los inversores no supieron bien a cuál de ellos atenerse en los primeros momentos de se...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Las ventas de los llamados bienes duraderos -aquellos que perduran entre tres y diez años- han caído en Estados Unidos un 2,4% durante el mes de mayo. Este dato confirma la debilidad de la demanda y, por tanto, las enormes dificultades que está encontrando la economía norteamericana para conseguir la recuperación. El presidente Bush solicitó inmediatamente a las autoridades monetarias un recorte de los tipos de interés para intentar una vez más la anhelada reactivación económica. Con estos datos en la manó, los inversores no supieron bien a cuál de ellos atenerse en los primeros momentos de sesión, aunque poco después de la apertura se impuso el influjo que tiene siempre un posible descenso del precio del dinero. No obstante, la reserva federal opina que un descenso de los tipos a corto plazo conllevaría una subida a largo ante el temor a un repunte de la inflación. Al cierre, el Dow Jones ganó 5,08 puntos y se situó en 3.290,70.Tokio vuelve a confirmar los temores de algunos analistas con una nueva baja de 253 yenes, lo que supone un nuevo mínimo para el Nikkei en este año y también para los últimos 68 meses. La situación de la economía japonesa preocupa a todo el mundo por cuanto puede afectar a las inversiones de ese país en el resto de los mercados. Sin embargo, fueron las noticias de Estados Unidos las que más afectaron a las bolsas europeas, sobre todo a París, que tras ir ganando altura durante toda la sesión llegó a bajar poco antes del cierre. Al final, el CAC 40 ganaba un 0,2%.

Londres pierde más de un 1% ante la negativa influencia de los mercados de futuros y la preocupación por los resultados empresariales. Francfort, bajó un 0, 15%.

Archivado En