El Palacio de Congresos revela que el firme de su explanada ha corrido peligro de derrumbarse

El Ayuntamiento llegó el primero a la meta de Madrid en la última etapa de la Vuelta Ciclista a España, y arrasó. La explanada del Palacio de Congresos, que depende del Ministerio de Industria, fue utilizada por los responsables municipales para asentar pesados camiones de la organización, carpas para la prensa y soportes publicitarios. El director del centro ha denunciado el hecho como un "allanamiento imperialista" del recinto. La ocupación, además, hizo peligrar el firme de la zona, situada sobre un aparcamiento.

El director del Palacio de Congresos, Francisco Asís Javier Rodríguez M...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Ayuntamiento llegó el primero a la meta de Madrid en la última etapa de la Vuelta Ciclista a España, y arrasó. La explanada del Palacio de Congresos, que depende del Ministerio de Industria, fue utilizada por los responsables municipales para asentar pesados camiones de la organización, carpas para la prensa y soportes publicitarios. El director del centro ha denunciado el hecho como un "allanamiento imperialista" del recinto. La ocupación, además, hizo peligrar el firme de la zona, situada sobre un aparcamiento.

El director del Palacio de Congresos, Francisco Asís Javier Rodríguez Mañas, comunicó por carta todo lo ocurrido a la alcaldía y a la concejal del distrito, y además lo denunció ante la Delegación del Gobierno. El director, que depende de la Secretaría General de Turismo del Ministerio de Industria, manifestó entonces, el 16 de mayo pasado, el día previo a la llegada de la vuelta, su "más enérgica queja", ante una serie de "hechos lamentables".Yamolidín Abduyapárov no fue el primero en cruzar la meta en Madrid durante la última etapa de la Vuelta a España, aunque así lo observaron muchos de los 400.000 madrileños que se concentraron ese día alrededor del paseo de la Castellana. El Ayuntamiento había llegado antes, en la tarde del sábado, y la atravesó como un elefante en una cacharrería, a tenor de la protesta.

"Sin que hubiese sido solicitado el permiso preceptivo, se invadió la explanada de la parte frontal del Palacio de Congresos de Madrid con unas 12 carpas publicitarias, a la vez que se instalaron cuatro grandes camiones de elevado tonelaje en el carril privado del palacio, reservado para el acceso al mismo de las autoridades visitantes". Donde dice "se invadió", Rodríguez Mañas quiere decir "el Ayuntamiento allanó con una actuación imperialista una explanada que nosotros alquilamos normalmente", según explicó ayer.

El director fue avisado a su casa de la ocupación por técnicos del palacio en la misma tarde del sábado 16 de mayo "cuando ya estaba todo montado, sin autorización, sin contratar el preceptivo alquiler y naturalmente, sin pagar nada".

Resistencia limitada

La invasión municipal planteó, entre otros, serios problemas en el firme de la explanada. "La resistencia en esa zona es muy limitada, al tener por debajo las tres plantas del aparcamiento de este organismo", explica la carta de la denuncia. Rodríguez Mañas, ahora, todavía no se ha recuperado del todo del miedo que pasó ante un posible derrumbamiento del firme, y se muestra "convencido" de que se forzaron las juntas de dilatación del aparcamiento. "Hay goteras", arguye.Este recinto -el patio delantero del palacio- es arrendado habitualmente por la dirección a las empresas, partidos y organismos que utilizan el palacio para celebrar mítines, convenciones o festejos. Un día de alquiler cuesta 150 pesetas por metro cuadrado utilizado. La Vuelta ocupó unos 1.100 metros cuadrados, y el Ayuntamiento se ahorró, por tanto, con su invasión unas 165.000 pesetas. El dinero, sin embargo, no es lo que más ha molestado al director del palacio.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Rodríguez Mañas no comprende la falta de "cortesía" municipal al no comunicar el interés por este espacio y por no tener en cuenta la escasa resistencia del firme, capacitado para soportar solamente hasta 400 kilos.

El escrito de denuncia añade que "se perturbó la actividad del montaje del congreso que se inició el día 17", y "se dificultó seriamente (y con un comportamiento harto deficiente hacia las personas) la instalación de un globo aerostático, que contaba con todos los permisos preceptivos (y cuya documentación se exhibió en aquellos momentos)".

La carta hace referencia, por último, al mal trato que recibieron ese día los jardines que rodean la plaza y cuyo mantenimiento corre de su cuenta. "Los desperdicios, latas, papeles, roturas, quebrantos y destrozos fueron auténtícamente lamentables", finaliza.

Rodríguez Mañas acusa directamente a Santiago Estrada, asesor técnico de la alcaldía, del comportamiento despótico que se propiné a algunos de sus empleados: "Llegó a decir: 'Esto es mío'". Pero Estrada no se acuerda de nada: "Yo no dije nada de eso, yo allí era nada más que. el coordinador en la llegada del Ayuntamiento. Para eso [orientó al periodista] hable mejor con Juan Algar, de Unipublic". -En la sede de Unipublic -organizadores de la Vuelta- se precisa que Algar no trabaja allí, aunque sí tuvo alguna relación con la última ronda a España. Ayer estaba ilocalizable.

Rodríguez Mañas ha comunicado todos estos hechos a varios concejales, entre ellos a la presidenta del distrito de Tetuán, María Antonia Suárez Cuesta, pero no ha recibido respuesta. Suárez Cuesta se encontraba ayer enferma y no acudió a su despacho.

Sobre la firma

Archivado En