Tribuna:

Resultados discretos

La Bolsa española continúa pegada a los resultados discretos, ya que la ausencia de decisiones concretas mantiene estancados volumen de contratación y precios. Si hay alguna lectura positiva, aunque sea un tanto forzada, hay que buscarla en la nula reacción de esta Bolsa ante la toma de beneficios que registraron los grandes mercados en la tarde anterior.Ayer, los inversores españoles se desayunaron con una subida de más de 575 yenes en Tokio, un dato que tan solo provocó envidia, ya que el mercado español no está para esos trotes. La jornada discurrió en el mismo tono que en los días anterior...

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La Bolsa española continúa pegada a los resultados discretos, ya que la ausencia de decisiones concretas mantiene estancados volumen de contratación y precios. Si hay alguna lectura positiva, aunque sea un tanto forzada, hay que buscarla en la nula reacción de esta Bolsa ante la toma de beneficios que registraron los grandes mercados en la tarde anterior.Ayer, los inversores españoles se desayunaron con una subida de más de 575 yenes en Tokio, un dato que tan solo provocó envidia, ya que el mercado español no está para esos trotes. La jornada discurrió en el mismo tono que en los días anteriores, con tanteos especulativos en unos cuantos valores, toma de beneficios en aquellos que han subido algo en las sesiones precedentes y una laguna total respecto del futuro, lo que limita la mayor parte de la actividad a los movimientos institucionales, que buscan más los ajustes que la ampliación o el abandono de posiciones.

El resultado de todos estos escarceos del dinero y el papel es el convencimiento de que el nivel del 250% es mas que una resistencia o un soporte, pues se está convirtiendo en la referencia obligada de cara al futuro, sea cual lea. El índice recuperó otras 24 centésimas que le atan aún más a la obligada referencia del 250%.

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