La gasolina 'súper' sube a 93 pesetas y el gasóleo se mantiene en 70,80
El precio del litro de gasolina súper se ha elevado una peseta al público desde hoy, por lo que cuesta 93 pesetas. De esta forma, se queda a una peseta para igualar el precio más alto -en pesetas corrientes- que ha tenido en la historia, durante el mes de octubre de 1990, en pleno conflicto del Golfo.La gasolina normal se ha elevado dos pesetas pasando a costar 90 pesetas, mientras el precio de la gasolina sin plomo ha pasado a 91,50 pesetas, lo que supone un aumento de 1,50 pesetas.
Los gasóleos de automoción (A y B), por su parte, mantienen el mismo precio que la quincena anter...
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El precio del litro de gasolina súper se ha elevado una peseta al público desde hoy, por lo que cuesta 93 pesetas. De esta forma, se queda a una peseta para igualar el precio más alto -en pesetas corrientes- que ha tenido en la historia, durante el mes de octubre de 1990, en pleno conflicto del Golfo.La gasolina normal se ha elevado dos pesetas pasando a costar 90 pesetas, mientras el precio de la gasolina sin plomo ha pasado a 91,50 pesetas, lo que supone un aumento de 1,50 pesetas.
Los gasóleos de automoción (A y B), por su parte, mantienen el mismo precio que la quincena anterior; es decir, 70,8 pesetas por litro. El Gobierno ha cumplido el compromiso alcanzado con los transportistas de no elevar el precio. El gasóleo de calefacción (C) se redujo 80 céntimos y su nuevo precio es de 38,40 pesetas para la venta a granel (3.500 litros o más) y de 41,2 pesetas para la venta en estaciones de servicio.
Tras este cambio, el precio de venta al público de la súper queda dos pesetas por debajo del precio máximo autorizado y es posible que en la próxima revisión vuelva a subir otra peseta con el objeto de ajustarse más al máximo autorizado.
El diputado del PP Blas Camacho acusa a Campsa "de hacer el juego a los ministros de Industria y de Hacienda y al presidente de Repsol a costa del bolsillo de los españoles". Camacho critica que haya subido la gasolina y no el gasóleo "por el compromiso del Gobierno con los transportistas, trasladándolo a los usuarios particulares". La organización de consumidores (OCU) ha afirmado que esta subida "pretende esconder bajo razones pueriles e increíbles la aplicación de un impuesto oculto", informa Efe.