El Parlamento ruso invalida el estado de emergencia de Yeltsin en Checheno-Ingushetia

El Sóviet Supremo (Parlamento) de Rusia negó ayer al presidente Borís Yeltsin la ratificación del decreto mediante el cual impuso el viernes el estado de emergencia en Checheno-Ingushetia, una república del Cáucaso habitada por menos de 1,5 millones de personas que acaba de demostrar que la descomposición del viejo Estado comunista no sólo ha hecho estallar la Unión Soviética, sino que va camino de desmembrar la propia Federación Rusa. Millares de personas con banderas verdes del islam y disparando tiros al aire celebraron en Grozni, la capital del territorio, la vuelta atrás de Moscú.

...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Sóviet Supremo (Parlamento) de Rusia negó ayer al presidente Borís Yeltsin la ratificación del decreto mediante el cual impuso el viernes el estado de emergencia en Checheno-Ingushetia, una república del Cáucaso habitada por menos de 1,5 millones de personas que acaba de demostrar que la descomposición del viejo Estado comunista no sólo ha hecho estallar la Unión Soviética, sino que va camino de desmembrar la propia Federación Rusa. Millares de personas con banderas verdes del islam y disparando tiros al aire celebraron en Grozni, la capital del territorio, la vuelta atrás de Moscú.

La Cámara rusa aprobó también la creación de una comisión negociadora que deberá mantener contacto con todas las partes implicadas en el conflicto de la república rebelde, a pesar de la oposición que algunos colaboradores del presidente ruso mostraron a la vía negociadora durante las sesiones. Al mismo tiempo, consciente del daño que hacía a Yeltsin con sus decisiones, el Parlamento abogó en la misma resolución por llevar adelante una investigación que trate de "descubrir a los culpables de tomar medidas políticas, técnicas y militares inadecuadas".En las discusiones, que se desarrollaron el domingo y ayer, los representantes del movimiento Rusia Democrática criticaron la decisión del presidente, pero dirigieron sus dardos no contra él, sino contra "los que le empujaron a dar ese paso". El blanco principal de esos ataques era el vicepresidente ruso, Alexandr Rutskói, máximo representante de los ex comunistas reformistas que ahora impulsan un partido socialdemócrata en Rusia. Rutskói fue el principal defensor público del estado de emergencia. La tesis de los opositores al decreto es que Yeltsin recibió una información parcial y sesgada que le llevó a cometer "un grave error".

Detener a Dudáiev

La comisión de investigación tendrá bastante más trabajo que el de aclarar quién es el responsable político de la decisión. Un punto controvertido es saber si dice la verdad Rutskói cuando asegura que el representante del Gobierno ruso en Checheno-Ingushetia, Ahmed Arsánov, pidió el miércoles que se tomaran medidas extraordinarias o lo cierto es lo que ahora asegura el propio Arsánov: "Jamás di el visto bueno a que se promulgara el decreto". Otro punto confuso es el envío a esa república del Cáucaso de un grupo de agentes, encabezados por el viceministro del Interior, cuyo objetivo era detener al líder independentista, Yojar Dudáiev, en cuanto se proclamara el estado de emergencia.Junto a la extensión de su voluntad negociadora, el Sóviet Supremo aprobó también la imposición de un control de las entradas y salidas de la república rebelde, con el fin de acabar con el tráfico de armas. Y como muestra de la preocupación real que existe por el desmembramiento de Rusia, el Parlamento encomendó al presidente y otras instituciones la adopción de medidas tendentes a "estabilizar la situación política de la Federación Rusa, garantizar su integridad territorial" y resolver las relaciones entre las repúblicas.

El máximo apoyo al decreto lo obtuvo Yeltsin de sus más directos adversarios: los conservadores. Uno de sus representantes, Víktor Alknis, tras lamentar que no se hubiera impuesto antes el estado de emergencia, declaró a la agencia Interfax: "Una nueva guerra del Cáucaso es inevitable".

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En