3.000 soldados turcos atacan campos kurdos instalados en el norte de Irak

Una fuerza terrestre de 3.000 hombres ha penetrado nueve kilómetros en territorio iraquí, después de dos días de bombardeo aéreo, para aplastar a los opositores del Partido de los Trabajadores Kurdo (PKK) que habitan campos de refugiados en el norte de Irak.Unas 10.000 personas huyen de los bombardeos aéreos, según informa la agencia iraní Irna, que añade que la carretera hacia Sulaimaniya, en el interior de Irak, está abarrotada.

El primer ministro turco, Mesut Yilmaz, dijo ayer que se produjeron hasta ocho salidas de cazabombarderos y helicópteros entre el viernes y el sábado para ata...

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Una fuerza terrestre de 3.000 hombres ha penetrado nueve kilómetros en territorio iraquí, después de dos días de bombardeo aéreo, para aplastar a los opositores del Partido de los Trabajadores Kurdo (PKK) que habitan campos de refugiados en el norte de Irak.Unas 10.000 personas huyen de los bombardeos aéreos, según informa la agencia iraní Irna, que añade que la carretera hacia Sulaimaniya, en el interior de Irak, está abarrotada.

El primer ministro turco, Mesut Yilmaz, dijo ayer que se produjeron hasta ocho salidas de cazabombarderos y helicópteros entre el viernes y el sábado para atacar las bases del PKK en el norte de Irak, pero ningún portavoz oficial ha confirmado la invasión terrestre.

Un portavoz del Frente Kurdo, coalición que agrupa ocho partidos kurdos de oposición, dijo, poco después de cruzar la fontera con Turquía, que en los bombardeos aéreos habían fallecido tres guerrilleros peshmergas, y otros nueve resultaron heridos.

Fuentes próximas a los militares occidentales que se encuentran desplazados a la frontera entre Turquía e Irak para proteger a los refugiados kurdos de posibles agresiones iraquíes, han expresado su malestar ante los ataques de la aviación del Ejército turco.

Shiíes rodeados

La Organización de Acción Islámica, uno de los principales grupos de oposición islámica en Irak, denuncia que varios pueblos han sido rodeados por el Ejército de Sadam Husein en las proximidades de Bassora, en el sur del país, y se ha decretado la ley marcial para controlar a los miembros de la oposición shií al régimen de Bagdad.

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