Una niña y dos embarazadas, heridas al incendiarse una pensión en Centro

Dos incendios casi simultáneos movieron ayer a los bomberos de Madrid de un lado para otro. Una pensión de la calle de la Libertad ardía sobre las cinco de la tarde, al tiempo que el depósito de papel usado de la Papelera Peninsular, en el paseo de Yeserías, comenzaba una lenta combustión. En el primero, una niña de tres años sufría quemaduras graves y dos mujeres embarazadas fueron rescatadas intoxicadas. En el segundo, 200 toneladas de papel se convertían en una pira que ha reavivado las quejas de los vecinos contra la fábrica y las sospechas de CC OO sobre unas presuntas "maniobras especula...

Dos incendios casi simultáneos movieron ayer a los bomberos de Madrid de un lado para otro. Una pensión de la calle de la Libertad ardía sobre las cinco de la tarde, al tiempo que el depósito de papel usado de la Papelera Peninsular, en el paseo de Yeserías, comenzaba una lenta combustión. En el primero, una niña de tres años sufría quemaduras graves y dos mujeres embarazadas fueron rescatadas intoxicadas. En el segundo, 200 toneladas de papel se convertían en una pira que ha reavivado las quejas de los vecinos contra la fábrica y las sospechas de CC OO sobre unas presuntas "maniobras especulativas".

Patricia Rosario Ramos, de tres años, sufrió quemaduras graves en el incendio de la pensión Nieto, situada en el número 8 de la calle de La Libertad, en Centro. El encargado del local, Severiano López García, se quemó levemente al intentar apagar el fuego. María Luz Antonia Suárez y Antonia Cuadros Vizcaíno, ambas embarazadas, fueron atendidas con síntomas de intoxicación. Las habitaciones estaban repletas de jeringuillas. Algunos vecinos comentaron que el incendio lo originó la niña "quemando droga en una cucharilla".Los bomberos controlaron la situación en una media hora. Pero no pararon. El depósito de papel usado de la Papelera Peninsular había comenzado a arder. Casi 60 bomberos con 12 vehículos se esforzaban por apagar las 200 toneladas de periódicos usados para reciclar que ardían en un muelle al aire libre. Los trabajos de extinción seguían al cierre de esta edición.

El portavoz de la papelera quitaba importancia al siniestro. "¿Doce coches de bomberos?, no hombre, muchos menos. ¿Peligro?, nada, ninguno".

Los vecinos de la calle de Melilla, que linda con la papelera, no opinaban lo mismo. "Esta industria es un foco de problemas. La hemos denunciado cientos de voces en la Junta de Arganzuela por los ruidos y humos que emite de noche, por el peligro de incendio y porque es un criadero de ratas", comentaba el presidente de una comunidad de vecinos.

La pira de papel, además, ha reavivado las sospechas de CC OO. Este sindicato denunció recientemente que la inmobiliaria francesa Trema, especializada en centros comerciales, había ofrecido 18.000 millones de pesetas a la Papelera Peninsular para que abandonara los terrenos que ocupa. El suelo sería recalificado de industrial a terciarlo, siempre según la citada central, gracias a las "influencias" de Trema.

Papelera Peninsular está junto al llamado Pasillo Verde Ferroviario, una millonaria operación urbanística para dotar a Arganzuela de oficinas, viviendas, equipamientos y centros comerciales.