Tribuna:

Tregua técnica

La bolsa, a falta de argumentos más convincentes, ha utilizado la coartada del aparente buen ambiente internacional para registrar una reacción técnica. Como quiera que la bolsa española es muy estrecha, la predisposición alcista se ha traducido en muchos casos en unas subidas excesivas, pero que han encantado a un público poco dado, sin embargo, a la credulidad a estas alturas de la tendencia. El volumen negociado ha vuelto a situarse en esa zona en la que todo son problemas, al tiempo que el índice general -que había caído casi nueve puntos en las, cuatro sesiones anteriores- continúa al bor...

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La bolsa, a falta de argumentos más convincentes, ha utilizado la coartada del aparente buen ambiente internacional para registrar una reacción técnica. Como quiera que la bolsa española es muy estrecha, la predisposición alcista se ha traducido en muchos casos en unas subidas excesivas, pero que han encantado a un público poco dado, sin embargo, a la credulidad a estas alturas de la tendencia. El volumen negociado ha vuelto a situarse en esa zona en la que todo son problemas, al tiempo que el índice general -que había caído casi nueve puntos en las, cuatro sesiones anteriores- continúa al borde de una zona de resistencia que parece ejercer cierta atracción sobre las cotizaciones.La decisión del Banco de Inglaterra de bajar en medio punto los tipos de interés, junto a un IPC del mes de junio que estaba cantado, han demostrado a los inversores que no hay porqué alarmarse, pues la coyuntura no parece hoy susceptible de empeorar. Ahora todo depende de que se considere suficiente el castigo sufrido por los precios, y por las carteras, y que el dinero decida volver al mercado. De momento, la facilidad con que subieron ayer los precios hará que los vendedores se lo piensen un par de veces antes de volver a intentarlo, aunque Wall Street puede forzar decisiones.

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