LA RONDA

Chistes en silencio

Para contar un chiste no hace falta ser demasiado gracioso, ni demasiado buen actor, ni siquiera dominar el arte de la mueca. Tampoco se corre el riesgo de llegar al desenlace y cruzarnos con una audiencia carente de cualquier signo externo de diversión. Si usted se considera un soso de solemnidad, pero tiene buena pluma y una excelente memoria para los chistes de menos de 30 palabras, acuda esta misma noche a la Sala Universal, en Parquesur de Leganés, a partir de las 23.30, y participe en el I Festival del Chiste Corto. Sólo tiene que rellenar una tarjeta con la gracia escogida, claridad y l...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Para contar un chiste no hace falta ser demasiado gracioso, ni demasiado buen actor, ni siquiera dominar el arte de la mueca. Tampoco se corre el riesgo de llegar al desenlace y cruzarnos con una audiencia carente de cualquier signo externo de diversión. Si usted se considera un soso de solemnidad, pero tiene buena pluma y una excelente memoria para los chistes de menos de 30 palabras, acuda esta misma noche a la Sala Universal, en Parquesur de Leganés, a partir de las 23.30, y participe en el I Festival del Chiste Corto. Sólo tiene que rellenar una tarjeta con la gracia escogida, claridad y letras mayúsculas. Vuelva mañana y compruebe si su chiste está entre los cinco finalistas. En el jurado, Humor Amarillo y Farsantes Fingidos. Entre los premios, un fin de semana en Lepe, con todos los gastos pagados, o 200.000 pesetas para el mejor, y regalos varios para los finalistas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En