Las equivocaciones de Mario Vargas Llosa

Algunas veces encontramos en labios de los notables discursos contrarios a la verdad, que con otras voces y con el tiempo se hacen verdades. Al leer EL PAÍS del 12 de mayo último hallamos errores en el artículo titulado La historia interminable, escrito por el novelista Mario Vargas Llosa.1. Dice el autor que "un Vargas vio por primera vez a Atahualpa tomando chicha en el cráneo de Huáscar". Esta afirmación es errónea, porque Huáscar murió en el tiempo en que Atahualpa era retenido como preso hasta su muerte. Cronistas de la época lo 'confirman unánimemente.

2. "`Indios pu...

Algunas veces encontramos en labios de los notables discursos contrarios a la verdad, que con otras voces y con el tiempo se hacen verdades. Al leer EL PAÍS del 12 de mayo último hallamos errores en el artículo titulado La historia interminable, escrito por el novelista Mario Vargas Llosa.1. Dice el autor que "un Vargas vio por primera vez a Atahualpa tomando chicha en el cráneo de Huáscar". Esta afirmación es errónea, porque Huáscar murió en el tiempo en que Atahualpa era retenido como preso hasta su muerte. Cronistas de la época lo 'confirman unánimemente.

2. "`Indios puros hay que buscarlos como aguja en un pajar". Enciclopedias, y en especial Countries of world, señalan: "Perú tiene una población que está compuesta de 45% de indios, 37% de mestizos, 15% de blancos y 3% de negros, asiáticos y otros". Recuérdese que un indio que se vuelve converso o médico queda siempre indio y no se vuelve blanco, negro o mestizo.

3. "Llegaron también en las alforjas de extremeños los derechos humanos, el pluralismo político y la libertad". No, señor Vargas Llosa. Llegó con el extremeño Francisco Pizarro la santa Inquisición, que negó todos estos derechos. A Atahualpa, en el juicio sumario, se le tildó de hereje contumaz por negarse a reconocer al Dios verdadero y proclamarse, en cambio, hijo del Sol. Por lo cual debía morir en la hoguera. Aunque el inca fue bautizado, Pizarro le conmutó la pena de hoguera por la de garrote. Muriendo finalmente degollado.

Es cierto que nuestro novelista puede convertir piedras en flores, pero es verdad que esas falsedades dañan la historia y enlodan los festejos del V Centenarío.- Ciprián Lípez Uño.