LA BATALLA POR EL PODER LOCAL

A las siete, en la 'Plaza del porro'

100 jóvenes, en una 'gran fumada' contra las anunciadas penalizaciones por consumir hachís

"A las siete, en la plaza del Porro". Esta contraseña, transmitida por el sencillo método del "corre, ve y dile", consiguió convocar ayer en la Plaza del Conde de Barajas a unos 100 jóvenes madrileños que, en corrillos, fumaban porros, charlaban, tocaban música y bebían litronas.La escena no es nueva en la plaza, algo así sucede muchas noches de primavera y verano, sobre todo en los sanisidros, cuando hay conciertos en las Vistillas y la Plaza Mayor. Pero ayer la cita tenía un significado especial: el colectivo vallecano "La Almorrana: No Mata Pero Molesta" y un gru...

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"A las siete, en la plaza del Porro". Esta contraseña, transmitida por el sencillo método del "corre, ve y dile", consiguió convocar ayer en la Plaza del Conde de Barajas a unos 100 jóvenes madrileños que, en corrillos, fumaban porros, charlaban, tocaban música y bebían litronas.La escena no es nueva en la plaza, algo así sucede muchas noches de primavera y verano, sobre todo en los sanisidros, cuando hay conciertos en las Vistillas y la Plaza Mayor. Pero ayer la cita tenía un significado especial: el colectivo vallecano "La Almorrana: No Mata Pero Molesta" y un grupo de estudiantes anarquistas habían convocado a los habituales de la zona a una gran fumada para protestar por las anunciadas penalizaciones contra el consumo de drogas en público.

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"La gente de porros y cervezas somos tranquilos, lo que tienen que hacer es meter mano en lo del caballo, que eso sí que es chungo", añade. "Es injusto, están metiendo a todo el mundo en el mismo saco: yonkis, porretas, y gente de litronas", apunta José.

Decenas de canutos de todos los tamaños se encendieron ayer en Conde de Barajas y se fumaron en corrillos, algunos bailaban y cerca, en la plaza Mayor, el Partido Popular, que propugna precisamente el control del consumo en público de estupefacientes, exprimía las últimas horas de campaña electoral.

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