La huelga de Iberia provoca retrasos de hasta cuatro horas en los aeropuertos

La huelga de Iberia provocó confusión y largas colas de espera en los aeropuertos a causa de la suspensión de 167 de los 435 vuelos previstos por la compañía. Madrid-Barajas, al ser un punto por el que pasan gran parte de los vuelos, fue el aeropuerto más afectado, con retrasos de hasta cuatro horas. El paro en Renfe, sólo de una hora por turno, tuvo escasa repercusión para los usuarios.

La huelga de Renfe seguirá siendo hoy y mañana de una hora por turno. Si no hay acuerdo en la reunión de mañana entre empresa y sindicatos, el viernes habrá un paro de 24 horas, que coincidirá con la si...

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La huelga de Iberia provocó confusión y largas colas de espera en los aeropuertos a causa de la suspensión de 167 de los 435 vuelos previstos por la compañía. Madrid-Barajas, al ser un punto por el que pasan gran parte de los vuelos, fue el aeropuerto más afectado, con retrasos de hasta cuatro horas. El paro en Renfe, sólo de una hora por turno, tuvo escasa repercusión para los usuarios.

La huelga de Renfe seguirá siendo hoy y mañana de una hora por turno. Si no hay acuerdo en la reunión de mañana entre empresa y sindicatos, el viernes habrá un paro de 24 horas, que coincidirá con la siguiente jornada de huelga prevista por los 23.000 trabajadores de tierra y trilpulantes de cabinas de Iberia.De los 167 vuelos suspendidos ayer por Iberia, 52 eran nacionales, 25 correspondían al puente aéreo, 84 eran europeos, y 6 intercontinentales. El peor momento del día fue entre las 2 y las 5 de la tarde, con retrasos de entre tres y cuatro horas en numerosos vuelos.

En los servicios mínimos se incluyeron el 25% del personal de tierra y el 20% del de vuelo. Numerosos trabajadores de la compañía se manifestaron en Madrid para pedir el desbloqueo de la negociación del convenio colectivo.

En el aeropuerto de Barcelona, la huelga provocó una menor presencia de pasajeros en las terminales. Los retrasos afectaron a un menor número de viajeros que en la jornada de huelga de la semana pasada. En el servicio del puente aéreo, algunos pasajeros tuvieron que dejar sus equipajes en Madrid y esperar la llegada de sus pertenencias en un vuelo posterior, informa Francisco Bracero.

Una pasajera expresó sus dudas sobre el tiempo que tardaría en recuperar su equipaje. "La espera puede ser como un embarazo, puede tardar meses", dijo. Otros pasajeros se mostraron más comprensivos con los retrasos. Uno de ellos afirmó: "Esto es normal, ya estoy acostumbrado".

Los trabajadores protestan por la pretensión de la empresa de congelar los salarlos si los sindicatos no se comprometen a negociar incrementos de productividad. Las centrales solicitan subidas del 9%. Las movilizaciones continuarán en Iberia los días 17, 20 y 24.

En Renfe, los paros parciales se desarrollaron sin que se registraran incidentes de consideración. Los trabajadores pararon una hora por turno, de 1 a 2 de la madrugada, de 8 a 9 de la mañana y de 7 a 8 de la tarde. La dirección de Renfe ofrece un aumento de la masa salarial global de 8.900 millones de pesetas (el 8%), que los sindicatos consideran insuficiente. Los paros afectaron principalmente a los viajes de largo recorrido y mercancías, ya que para cercanías la empresa fijó servicios mínimos de entre el 50% y el 75% de los trenes, según CC OO. En los trayectos de largo recorrido hubo retrasos de hasta dos horas. Según los sindicatos, secundaron la huelga el 90% de los trabajadores.

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