Incendiados cerca de 50 vehículos en las calles de la capital en poco más de un mes

Los bomberos no dieron abasto en la madrugada de ayer para sofocar los 12 incendios declarados en vehículos -10 turismos y 2 motocicletas- estacionados en varias calles de Madrid. Con éstos siniestros, son ya cerca de 50 los vehículos quemados en poco más de un mes en Madrid. Seis de los 12 coches incendiados, casi todos viejos pero útiles, se encontraban aparcados en la calle del Puerto de Santa María (Hortaleza), donde los gritos de una vecina, que se despertó por el humo y vio cómo ardían a la vez varios vehículos, ahuyentaron a los pirómanos.

"Esto es una sinvergonzonería y siempre ...

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Los bomberos no dieron abasto en la madrugada de ayer para sofocar los 12 incendios declarados en vehículos -10 turismos y 2 motocicletas- estacionados en varias calles de Madrid. Con éstos siniestros, son ya cerca de 50 los vehículos quemados en poco más de un mes en Madrid. Seis de los 12 coches incendiados, casi todos viejos pero útiles, se encontraban aparcados en la calle del Puerto de Santa María (Hortaleza), donde los gritos de una vecina, que se despertó por el humo y vio cómo ardían a la vez varios vehículos, ahuyentaron a los pirómanos.

"Esto es una sinvergonzonería y siempre nos toca a los mismos, a los que utilizamos el coche para ir al trabajo", se quejaba ayer Ana Isabel Hurtado, propietaria de dos de los seis vehículos quemados en la mencionada calle de Hortaleza.Ningún vecino vio a nadie quemar los coches, aunque todo los indicios revelan que ha habido intencionalidad. Algunos residentes se percataron de las llamas y el humo que salían de los coches e incluso bajaron a la calle para auxiliar a los bomberos y evitar que el fuego se propagara a los inmuebles cercanos.

Dos de los seis vehículos destruidos por el fuego son de la marca Citroën GS (uno de éstos seminuevo y el otro bastante viejo), y otros dos, Seat 127 de los antiguos. También fueron presa del fuego una furgoneta marca Renault y un Seat 124.

Los vecinos sospechan que tras estos indiscriminados incendios "puede haber personas interesadas en la compraventa de automóviles", ya que la mayoría son viejos. "Otra explicación no encuentro", refiere Víctor Martín, otro de los vecinos. En casi todos los casos, los pirómanos rompieron algún cristal del coche y echaron dentro papeles prendidos en llamas. En cuestión de minutos, señalaron algunos testigos, el fuego carbonizó los coches. "Podía haber sido una catástrofe; mire qué cerca están de los pisos", declaró aturdido otro vecino.

Las calles de Mateo Inurria, Bocángel, Calanda, Torquemada y Burgo de Osma fueron las otras escogidas en la madrugada de ayer por los pirómanos para cometer sus fechorías.

Alerta policial

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La policía de Madrid ya ha sido alertada ante la presunción de que existe una banda (o quizá varías) de pirómanos dedicada los fines de semana a destruir vehículos con fuego. La penúltima vez que los pirómanos quemaron coches fue en la madrugada del pasado sábado cuando destruyeron otros tres vehículos, dos coches y una motocicleta.

Lavapiés es el barrio que más siniestros de esta índole ha registrado durante el pasado mes de abril. Hacia la mitad de ese mes, la policía había contabilizado 15 coches quemados en la zona. El primero fue quemado en la noche del día 3.

La profusión de incendios ha hecho que los vecinos estén hablando ya del pirómano de Lavapiés. El incremento de la vigilancia policial en el barrio ha retraído últimamente a los pirómanos, que sólo en tres días calcinaron seis vehículos estacionados.

Otros 10 vehículos fueron incendiados el domingo 28 de abril en las calles de Toledo, Media Legua, Santa Susana y cerca de la Casa de Campo. El 24 de abril, los pirómanos destruyeron otros 11 coches en Chamberí, Carabanchel y Arganzuela.

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