A la sombra de Wall Street

La Bolsa ha mantenido en esta sesión un tono moderadamente optimista, no tanto por sus propias expectativas como por la posibilidad de que esta vez Wall Street consiga superar la barrera del 3.000, a la que se acercó con decisión en la tarde del martes. A pesar de barajarse esas posibilidades, el volumen de contratación no indicó una toma de posiciones amplia salvo en casos muy concretos, en los que alguna sociedad consiguió centrar toda la actividad especulativa del mercado. Este fue el caso de Petromed, la sociedad perteneciente al grupo Banesto sobre la que pesaron toda clase de actuaciones...

La Bolsa ha mantenido en esta sesión un tono moderadamente optimista, no tanto por sus propias expectativas como por la posibilidad de que esta vez Wall Street consiga superar la barrera del 3.000, a la que se acercó con decisión en la tarde del martes. A pesar de barajarse esas posibilidades, el volumen de contratación no indicó una toma de posiciones amplia salvo en casos muy concretos, en los que alguna sociedad consiguió centrar toda la actividad especulativa del mercado. Este fue el caso de Petromed, la sociedad perteneciente al grupo Banesto sobre la que pesaron toda clase de actuaciones a lo largo de la jornada, basándose en el rumor de que la empresa iba a ser objeto de una OPA (operación de pública adquisición), lo cual fue desmentido por el grupo a media tarde.Al margen de esas actuaciones puntuales, los inversores se limitaron a tantear el mercado en busca de los valores que pueden tener una respuesta positiva a corto plazo. Alguna eléctrica fue objeto de esa atención por parte de las sociedades de bolsa afines a los grupos bancarios, aunque el trasiego de títulos no consiguió tener un efecto inmediato sobre el precio de las acciones. El índice madrileño subió al cierre 1,43 puntos, lo que le permite mantenerse en esa zona neutra en la que parece encontrarse bastante cómodo.