Dístrítos mas poblados que Bilbao, atendidos por sus concejales sólo dos días por semana

Los presidentes de la mitad de las 21 juntas de distrito, el eslabón municipal más próximo al ciudadano, acuden a su despacho una media de uno o dos días a la semana, según un informe del grupo municipal de Izquierda Unida. En algunos casos, distritos más poblados que Alicante o Valladolid son atendidos por su presidente "una tarde a la semana". Para IU, habría que reforzar el papel de las juntas, ampliar sus competencias y promover elecciones directas. Según el equipo de gobierno, las juntas no están desatendidas, "aunque quizá Madrid necesita un número mayor de concejales", una posibilidad q...

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Los presidentes de la mitad de las 21 juntas de distrito, el eslabón municipal más próximo al ciudadano, acuden a su despacho una media de uno o dos días a la semana, según un informe del grupo municipal de Izquierda Unida. En algunos casos, distritos más poblados que Alicante o Valladolid son atendidos por su presidente "una tarde a la semana". Para IU, habría que reforzar el papel de las juntas, ampliar sus competencias y promover elecciones directas. Según el equipo de gobierno, las juntas no están desatendidas, "aunque quizá Madrid necesita un número mayor de concejales", una posibilidad que está estudiando el PSOE.

El ministro de Administraciones Públicas, Joaquín Almunia, afirmó ayer que la Federación Socialista Madrileña (FSM) -está estudiando la ampliación del número de concejales del Ayuntamiento de Madrid-. Según declaró durante el congreso de la FSM., "a cada coricejal madrileño le corresponden excesivos habitantes"'.La reflexión de Almunia coincide con la opinión del equipo de gobierno municipal. El concejal popular José Gabriel Astudillo, coordinador de las juntas de distrito, considera que Madrid necesítaría el doble de ediles. "París, por ejemplo, tiene unos 150 concejales, y Burdeos, con 300.000 habitantes, tiene más concejales que Madrid".

El Ayuntamiento de Madrid tiene 55 ediles, aunque sólo 28 forman parte del equipo de Gobierno. Estos deben atender 21 juntas y 18 áreas (incluida la alcaldía, y las cuatro tenencias de alcaldía), lo que obliga a alguno de ellos a compaginar varias responsabilidades.

Atención marginal

En este pluriempleo, las juntas de distrito son las que salen peor paradas. Los concejales delegados de algún área dedican menos de dos días a la semana al distrito, según el informe de IU. "Al menos 10 juntas están abandonadas o reciben una atención marginal por parte de sus responsables", explica Francisco Herrera, portavoz de la coalición.

La junta de Ciudad Lineal, un distrito con 226.000 habitantes, más poblado que Bilbao, ocupa en el estudio el primer puesto de inhibición por parte de su responsable, el concejal del CDS Fernando López-Amor. Según IU, su dedicación es nula. "Prácticamente! no aparece por el despacho", comenta Herrera. López-Amor contestó a la alusión con un "sin comentarios", a través de su secretaria.

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José Gabriel Astudillo, que comparte la responsabilidad de la Concejalía de Participación Ciudadana y Coordinación con la presidencia del distrito de Retiro (128.000 habitantes, tantos como Córdoba), acude a su despacho de la junta "a ratos", Eduardo Larraz, concejal de Circulación, va a la sede de la junta de Charriberí (169.000 habitantes, más que Valladolid) "una tarde a la semana- y no recibe a los vecinos, labor de la que se ocupa un vocal.

Carlos Martínez Serrano, concejal de Régimen Interior, dedica los martes a atender uno de los distritos más poblados de Madrid, el del Puente de Vallecas, donde residen 225.000 personas. El mismo tiempo, un día a la semana, dedica el concejal de Cultura, Joaquín Álvarez de Toledo, a los vecinos de Villaverde (127.000 habitantes). Pedro Ortiz, concejal de Prospectiva, acude a la junta de Salamanca (166.000) dos días a la semana y "no atiende directamente a los vecinos", y Clemente Torres, presidente de Arganzuela (119.000), va todos los días al despacho, "aunque dos horas", según IU.

Otros cuatro presidentes de distrito reparten la semana entre dos juntas. A Manuel Mártínez-Blanco, presidente de Latina y Carabanchel, le llama Jullán Reboyo, vocal de IU en Latina, el vía Carpetana -la calle que separa ambos distritos- "porque ni está en uno ni en otro". Sumando la población que reside en sus dominios, más de medio millón de habitantes, Martínez-Blanco podría ser el alcalde de la tercera ciudad de España tras Madrid y Barcelona.

En estos casos de pluriempleo el concejal dedica tres días a una junta y dos a la otra. Venancio Mota va martes y jueves a Vicálvaro y el resto de la semana a Moratalaz. Vicente Díaz Zazo dedica los lunes, miércoles y vier nes a Hortaleza y los martes y jueves a Barajas, y lo mismo debe hacer Miguel Cantos con San Blas y Chamartín.

José Gabriel Astudillo consi dera que la situación no es nueva. "Todos los equipos de gobierno anteriores han tenido concejales haciendo doblete y hasta triplete. El análisis de IU es demagógico. Se puede compaginar la presidencia de un distrito con una concejalía". Astudillo afirma tener tiempo suficiente para su junta. "Todos recorremos nuestro distrIto. En concreto, yo esta semana he visitado instalaciones deportivas, colegios y centros de la tercera edad por las tardes. Tenemos vocales y coordinadores que nos transmiten los problemas, además de los funcionarios que atienden permanentemente la junta".

Según Astudillo, el hecho de que Madrid necesite mis concejales "no es sinónimo de que no se estén atendiendo los problemas de los distritos. Hay que dedicar más horas al trabajo, pero es perfectamente compatible".

Francisco Herrera, a la vista de los datos obtenidos en las juntas para el informe, sólo ha encontrado tres aprobados en dedlcación: Elena Utrilla, presidenta de Vallecas Villa; Miguel Martín Vela, de Fuencarral, y Ángel Matanzo, en Centro.

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Izquierda Unida, partidaria de elecciones directas a las juntas

Viene de la página 1Izquierda Unida considera que el papel de las juntas de distrito está devaluado. Desde estos ayuntamientos de barrio se gestionará este año una de cada cinco pesetas del presupuesto municipal. En total, 41.804 millones de pesetas. Según IU, al menos el 35% del presupuesto municipal -sin incluir gastos de personal- debería administrarse directamente desde los distritos.

"La escasa dedicación de muchos p residentes de junta repercute también en la atención a los vecinos", prosigue Herrera. "Para muchos es tan dificil ver a su concejal como para mí llamar a Bush para que acabe con la guerra", explica. La Federación Regional de Asociaciones de Vecinos, tras consultar a sus afiliados, afirmaba en otro informe que en 17 distritos la participación de las asociaciones es nula o mala, y en 12 es "muy difícil entrevistarse con el concejal".

"Todo ello indica que se hace necesario modificar el actual sistema de funcionamiento de las juntas", afirma Herrera. La propuesta de la coalición, que va a incluir en su programa electoral, es acometer un proceso de descentralización que aumente las competencias de las juntas -lo que costaría unos 10.000 millones de pesetas- y la realización de elecciones directas a las juntas -para que exista un equipo de gobierno en los distritos-

Si se produjeran elecciones directas en los barrios, los vecinos de cada distrito podrían elegir a sus presidentes y vocales de junta independientemente del signo político del Ayuntamiento central. Según IU, y a tenor de los datos de las elecciones generales de 1989, el PP tendría mayoría absoluta en cinco distritos (Retiro, Salamanca, Chamartín, Chamberí y Moncloa) y en tres el PSOE (Usera, Puente de Vallecas y Vicálvaro).

El caso de Barcelona

El reglamento de descentralización y participación de Barcelona, elaborado en 1986, contempla para la gestión de sus 10 distritos un proceso parecido al que propone Izquierda Unida para Madrid. Aunque aún no hay elecciones directas, la presidencia de las juntas se decide en función de los resultados electorales de cada distrito, según informa Lluís Uria.

En concreto, la actual organización municipal barcelonesa establece que el presidente de cada junta sea propuesto por el llamado consejo del distrito, un órgano de 15 miembros similar al pleno municipal. Los consejeros -que no son concejales, aunque sí el presidente- deberán ser elegidos directamente por los electores de cada distrito cuando se apruebe la Carta Municipal, que está en proceso de elaboración. Ahora, a falta de esta legislación, los consejos son designados en función de los resultados electorales en cada distrito.

Así, en la actualidad, seis distritos están gobernados por los socialistas y cuatro por Convergencia i Unió (CIU). Sin embargo, el Ayuntamiento central está gobernado por el PSOE.

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