Las tarifas dificultan la privatización de la Entel argentina

Las diferencias entre el Gobierno argentino y los consorcios adjudicatarios de la empresa estatal de teléfonos Entel en las discusiones para fijar los nuevos precios del servicio se han convertido en el principal escollo para que pueda concretarse el traspaso de la compañía pública a manos privadas.EL vicepresidente argentino, Eduardo Duhalde, manifestó ayer que el Gobierno "no está dispuesto a ceder ante las presiones de los adjudicatarios, que pretenden una tarifa que, a nuestro criterio, no corresponde y perjudica los intereses de nuestra nación". Por su parte, el secretario general de la P...

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Las diferencias entre el Gobierno argentino y los consorcios adjudicatarios de la empresa estatal de teléfonos Entel en las discusiones para fijar los nuevos precios del servicio se han convertido en el principal escollo para que pueda concretarse el traspaso de la compañía pública a manos privadas.EL vicepresidente argentino, Eduardo Duhalde, manifestó ayer que el Gobierno "no está dispuesto a ceder ante las presiones de los adjudicatarios, que pretenden una tarifa que, a nuestro criterio, no corresponde y perjudica los intereses de nuestra nación". Por su parte, el secretario general de la Presidencia argentina, Eduardo Bauzá, anunció también ayer que la próxima semana se firmará el contrato de transferencia de Aerolíneas Argentinas al consorcio que encabeza la compañía española Iberia, tras la firma, el viernes, de un decreto a través del cual la compañía estatal se ha transformado en sociedad anónima.

La Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel) fue dividida en dos zonas para su venta. La región sur fue adjudicada a un consorcio liderado por la Compañía Telefónica de España, mientras que la norte fue cedida a un grupo integrado por la italiana Stet y la France Cable et Radio.

Criterios

El Gobierno había anunciado que ambas zonas serían transferidas definitivamente el próximo 8 de noviembre, pero los diferentes criterios existentes en las negociaciones para fijar las tarifas ponen en riesgo los plazos fijados oficialmente. Representantes de Stet y France Cable han manifestado que no se harán cargo de Entel si las tarifas no garantizan una gestión rentable, mientras que el diario La Nación informaba ayer que la Telefónica española había amenazado con abandonar su participación. Un portavoz de la empresa española desmintió la noticia.

Las diferencias entre las posiciones del Gobierno argentino y los adjudicatarios ponen en juego el destino de entre 30.000 y 50.000 millones de pesetas de facturación anual de Entel.

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