El equipo de gobierno de Rodríguez Sahagún, dividido ante el nuevo plan general urbanístico

El equipo de gobierno municipal se encuentra dividido acerca del futuro Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (PGOUM), cuyo avance se pretende aprobar en el pleno de este mes, según reconocieron fuentes del Partido Popular (PP). Estas divergencias, que hasta ahora no habían trascendido, quieren resolverse, sin embargo, internamente con el fin de no dar una imagen de desunión que pueda ser aprovechada por los partidos de la oposición.

El proyecto del nuevo PGOUM fue presentado en junio a los miembros de la ponencia política creada para revisar el desarrollo de un plan aprobado ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El equipo de gobierno municipal se encuentra dividido acerca del futuro Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (PGOUM), cuyo avance se pretende aprobar en el pleno de este mes, según reconocieron fuentes del Partido Popular (PP). Estas divergencias, que hasta ahora no habían trascendido, quieren resolverse, sin embargo, internamente con el fin de no dar una imagen de desunión que pueda ser aprovechada por los partidos de la oposición.

El proyecto del nuevo PGOUM fue presentado en junio a los miembros de la ponencia política creada para revisar el desarrollo de un plan aprobado en 1985 con vigencia de 15 años. José Luis Garro, portavoz del CDS, tercer teniente de alcalde y coordinador de temas de Urbanismo, explicó entonces que las previsiones del PGOUM de 1985 habían quedado desbordadas y más que una revisión del programa de actuación para el segundo cuatrienio se había decidido promover la aprobación de un nuevo plan.Ni en la presentación, a la que asistieron representantes del PP, ni en las conferencias de prensa del equipo de gobierno, ninguno de los concejales populares manifestó su oposición. Ante este silencio, el PSOE preguntó si la propuesta del nuevo plan era apoyada por todo el equipo de centro-derecha o sólo por el CDS. La respuesta fue que era de todo el equipo, aunque el PP apoyó la propuesta del PSOE e IU de retrasar el debate hasta este mes para estudiar el alcance del plan, que, en principio, consideran "demasiado ambicioso".

Concursos de suelo

El aspecto que más parece preocupar al PP es la figura de los concursos de suelo, sistema por el que los propietarios de terreno, rústico o urbanizable pendiente de desarrollar, pugnarán para recalificar su terreno a cambio de ofrecer una importante parte para equipamientos y viviendas sociales.Según el proyecto municipal, sólo las mejores ofertas serán merecedoras de recalificación. Incluso se contempla la posibilidad de que el Ayuntamiento expropie parcelas a favor de promotoras con ofertas más atractivas que las de los propietarios.

Garro minimizó ayer la existencia de diferencias en el equipo municipal. "Puede que nazcan de personas próximas a pequeños sectores que pretenden dar respuesta a problemas tan acuciantes como el de la vivienda, pero con el freno de mano" "No creo que ahora, con las necesidades de Madrid, sea sensato calificar el plan de ambicioso Es posible que haya pequeños sectores a quienes preocupe esta iniciativa, pero lo importan te es la filosofía del plan orientada a acabar con el corsé que en estos años ha tenido Madrid".

Respecto a la posibilidad de que el proyecto sea modificado. Garro se mostró dispuesto a aceptar sugerencias que mejoren el texto inicial. Garro aseguró la voluntad del equipo municipal de debatir el proyecto y llevar el avance del mismo para su aprobación al pleno de este mes.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

El plan ha sido criticado, entre otros, por Miguel Ángel Pascual, gerente del Instituto de la Vivienda de Madrid; Juan Barranco, ex alcalde de Madrid, y Eduardo Mangada, consejero de Política Territorial.

En síntesis, el equipo de gobierno propone habilitar en esta década 70 millones de metros cuadrados de suelo rústico para construir 125.000 viviendas sociales. El crecimiento de la ciudad se apoyaría en los cinturones de circunvalación. El mayor volumen de viviendas se situaría en el corredor junto a la M-40.

Según la propuesta inicial, de los 70 millones de metros que el PGOUM debería recalificar, la mitad tendría que ser cedida al Ayuntamiento para equipamientos, infraestructuras y zonas verdes. Los propietarios de¡ terreno habrán de ceder otro 30% del suelo restante para viviendas sociales y promover, dentro del 20% del suelo que les queda, un cierto cupo de viviendas a precio tasado. El resto podrá dedicarse a oficinas, comercios y vivienda libre.

Archivado En